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Filadelfia atrapó a Tom Brady y su primer Super Bowl

por Avatar

Tom Brady lanzó un último Ave María. La plegaria viajó en el ovoide que buscaba brazos amigos para aterrizar y salvar a los Patriotas de Nueva Inglaterra del abismo. Pero el pase desesperado nunca fue abrazado. Cayó en el gramado pintado del U. S. Bank Stadium de Minnesota. La providencia bendijo esta vez a las Águilas de Filadelfia, que celebraron el primer Super Bowl de su historia con marcador de 41-33.

Si bien todo se decidió con la última acción, el golpe mortal de los rapaces fue dado tres minutos antes de la culminación, por Brandon Graham, el hombre que atrapó al mariscal de campo Brady y, metafóricamente, el trofeo Vince Lombardi, galardón que reconoce al equipo como el mejor de la temporada de NFL.

Graham burló a los guardaespaldas de Brady y, con el brazo izquierdo, le derribó el balón al hombre considerado como el mejor quarterback de la historia. Poco después, el “Fly, Eagles… Fly”, retumbó en el escenario de Minneapolis.

Clavar la daga mortal no significa ser el mejor, por eso el Más Valioso del juego fue Nick Foles, mariscal de campo de Filadelfia y quien no era el titular del equipo al comienzo de la temporada. El jugador de 29 años de edad se apoyó en sus corredores para ser efectivo con los pases aéreos.

Foles, quien todavía no tiene un plan definido para la próxima temporada, era una de las razones que empujaron a los apostadores y especialistas a tildar a las Águilas como los “débiles” en el enfrentamiento. De hecho, tampoco tuvieron el favoritismo en el duelo de la Conferencia Nacional contra los Vikingos de Minnesota.

Aunque ambas ofensivas lograron más de 1.000 yardas conjuntamente, la defensiva de Filadelfia logró imponerse en los minutos finales y evitar otro milagro de Brady y del Ave María salvador.


Justin homenajeó a Prince

Justin Timberlake hizo lo que sabe: bailó y montó un show en el espectáculo del medio tiempo del Super Bowl. Convirtió el U. S. Bank Stadium de Minnesota en un gigantesco escenario y promocionó, además, el lanzamiento de su nuevo disco Man of The Woods. El ex NSYNC no protagonizó un bochorno, como hace 14 años cuando le dejó un seno al aire a Janet Jackson; solo rindió homenaje a la recordada estrella del pop Prince, que volvió a la vida en un enorme holograma. Timberlake también entonó, acompañado por un interminable equipo de baile, éxitos como “Mirrors” y “Cry me a river”.