En una noche repleta de estrellas del beisbol, Eugenio Suárez hizo lo que mejor sabe hacer: conectar jonrones. El infielder guayanés ganó el 22° Festival del Jonrón Pepsi al conectar un total de 34 estacazos en una final emocionante con el jardinero de los Cerveceros de Milwaukee Jackson Chourio.
Suárez, que en la MLB juega para los Arizona Diamondbacks, se llevó el trofeo en casa, el Estadio Monumental de Caracas Simón Bolívar, donde su público caraquista lo aupó de principio a fin cada vez que conectaba un cuadrangular.
“Significa bastante alcanzar este logro aquí en el Monumental junto a los Leones del Caracas”, expresó el infielder sobre el equipo con el que compite en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP). Su logró, subrayó ya con trofeo en mano, se debió a que pudo tener un buen contacto ante los lanzamientos y a la agresividad de su swing.
No la tuvo fácil en ningún momento Suárez, que hizo dupla en la primera ronda con el receptor William Contreras, que en la última temporada de las Grandes Ligas conectó 23 jonrones para los Cerveceros. Los otros duelos fueron Andrés Chaparro – Renato Núñez, Jackson Chourio – José Altuve y Moisés Gómez – Luisangel Acuña. Estrellas tanto en el país como en la gran carpa.
Sin embargo, el guayanés se perfiló como ganador desde la primera parte con 12 cuadrangulares frente a tres de Contreras. En esta etapa también destacaron Chaparro (9), Núñez (8), Chourio (7) y Gómez (5), todos clasificados a la ronda semifinal. Altuve y Acuña conectaron dos y uno, respectivamente.
La semifinal estuvo reñida: todos los participantes conectaron más de cinco bambinazos. Chourio la sacó 12 veces, Suárez, 10; Chaparro, 10; Gómez, siete, y Núñez, siete. Cada uno demostró su calidad en una ronda en la que algunos comenzaron un poco fríos y luego se calentaron para conectar con fuerza varias pelotas, entre ellos el caraquista. El infielder sacó las primeras dos rápidamente, pero luego se aflojó y pidió tiempo; al volver, cuando parecía que no iba a pasar a la final, envió un ramillete de bolas fuera del estadio y superó a sus compañeros.
El veinteañero de los Cerveceros, por su parte, ofreció una actuación estelar en semifinales al batear 12 bambinazos, seis de ellos antes de tomarse el descanso. Considerado por la MLB como uno de los mejores prospectos este año, Chourio demostró la calidad y agresividad de su swing al hacer conexiones fuertes hacia la banda contraria del Monumental, con lo que amenazó seriamente las pretensiones de Suárez.
Sin embargo, en la final el caraquista volvió a sacar 12 bolas del estadio, esta vez con un swing más certero que el de las semifinales, y venció a un Chourio que solo pudo conectar seis cuadrangulares. El estadio estaba a reventar de la emoción de la fanaticada, y Suárez admitió al recibir su premio el amor que siente por la pelota nacional.
“Les agradezco a mi esposa y mis hijas por haber venido a verme y qué más satisfactorio que ganar frente a ellas. Gracias a mi gente de los Leones y a toda la fanaticada de Venezuela”, dijo el nuevo rey del jonrón desde el campo del Monumental. Añadió: “He recibido cariño desde que llegué. Hoy sentí el apoyo. Esta era una meta trazada desde hace tiempo, ganar el Festival de Jonrones, y la cumplí”.
Suárez demostró que una de sus especialidades es el jonrón. Es el quinto venezolano con más bambinazos en la MLB con 276 de por vida, a los que se suman sus 831 carreras impulsadas y 740 anotadas. En la temporada que acaba de terminar la sacó 30 veces, conectó 146 hits y pisó el home en 90 oportunidades. Y apenas llegó a Venezuela lo que ha hecho ha sido producir.
En el enfrentamiento que Caracas le ganó 8-7 a Navegantes del Magallanes, el infielder conectó, por primera vez, dos cuadrangulares en un partido, y ahora se perfila como protagonista de la temporada de la LVBP al hacerse con el título del Festival Jonrón Pepsi.
Fue una noche en el Monumental también para ver a algunas de las principales figuras del beisbol venezolano, como la estrella de los Astros de Houston José Altuve, Omar Vizquel, que caminó de un lado a otro en el estadio tomándose fotos con los fanáticos, o el propio Luisangel Acuña, que juega para los Mets de Nueva York.
El recinto de pelota más grande del país estaba repleto de gente. Si bien no es un Caracas – Magallanes, muchos acuden al Festival Jonrón Pepsi para tener la oportunidad de ver a grandes del deporte. Por ejemplo, el año pasado Miguel Cabrera estuvo entre los competidores luego de anunciar su retiro en la MLB tras una carrera brillante.
Al terminar la premiación, se pudo ver a Suárez compartiendo con su familia y algunos fanáticos que intentaron acercarse a él para pedirle un autógrafo. El hombre, agotado luego de la jornada, atendió a los que pudo. Cuando terminó aparecieron en el campo Servando y Florentino para cerrar.
Los hermanos Primera llegaron en dos vehículos que dieron un par de vueltas en el parque y luego se montaron en una tarima que lucía pequeña ante la inmensidad del Monumental. Quizás algunos solo fueron a verlos, porque apenas salieron para interpretar temas como “Una canción que te enamore” o “Una fan enamorada” el estadio reventó entre bailes y cánticos de gente que o cargaba la cerveza a mano alzada o reía de emoción.