El Santos de Sao Paulo, el equipo donde militan Yeferson Soteldo y Tomás Rincón, cayó este miércoles a la segunda división del fútbol de Brasil por primera vez en su historia centenaria.
Tras años de crisis deportivas y económicas, el fantasma del descenso se concretó para el tradicional Peixe. La caída del equipo en el que brillaron Pelé y Neymar se da justamente cuando está a punto de cumplirse un año de la muerte del rey del fútbol.
Aunque llegó en la posición 15 a la última jornada del Brasileirao, con 43 puntos, el Santos de Soteldo perdió en casa 2-1 con Fortaleza, lo que lo condenó a la segunda división. El grupo retrocedió definitivamente hasta la casilla 17, la última en dar un boleto indeseado para jugar en la Serie B en 2024.
Su exatacante Marinho, en el minuto 39, abrió la cuenta para los visitantes, entrenados por el argentino Juan Pablo Vojvoda. El defensa Messias puso la paridad (58), pero el delantero argentino Juan Martín Lucero (90+6) los sepultó en el descuento.
Al final del cotejo hinchas lanzaron diversos objetos al campo y hubo desórdenes a las afueras del estadio, con coches y buses incendiados, según imágenes transmitidas por medios locales.
Al Santos tampoco le jugó a favor que los otros dos equipos que comenzaron la fecha 38 por debajo suyo en la tabla, Vasco da Gama y Bahia, ganaran sus respectivos partidos contra Red Bull Bragantino y Atlético Mineiro.
Vasco, del técnico argentino Ramón Díaz, venció 2-1 y Bahia, del mítico exportero Rogério Ceni, goleó 4-1.
Ahora apenas sobreviven Sao Paulo y Flamengo como los únicos equipos brasileños en nunca haber caído a la segunda categoría.
Sin reacción
Ocho veces campeón brasileño, tricampeón de la Copa Libertadores y bicampeón de la desaparecida Copa Intercontinental, Santos tuvo un comienzo de año atropellado.
El equipo fundado en la ciudad portuaria de Santos en 1912 fue eliminado en la fase de grupos del torneo estatal de Sao Paulo (Campeonato Paulista) en marzo. Luego perdió en octavos de final de la Copa do Brasil en mayo y en la fase de grupos de la Copa Suramericana en junio.
En toda la temporada tuvo cuatro entrenadores en propiedad: los brasileños Odair Hellmann, Paulo Turra y Marcelo Fernandes y el uruguayo Diego Aguirre.
Tras terminar la primera vuelta del Brasileirao en zona de descenso, en agosto, el club apostó a refuerzos de nombre para apoyar a los ‘Meninos da Vila’, como se conoce a los juveniles surgidos de su prestigiosa cantera, en la que se formó Neymar.
Llegaron internacionales como el capitán de Venezuela, Tomás Rincón, y el delantero colombiano Alfredo Morelos.
El venezolano lideró el medio campo, pero no consiguió llevar a buen puerto a uno de los equipos con peor defensa del torneo (64 tantos en 38 partidos).
Aparte de los malos resultados convivieron con una fuerte presión de los hinchas, con algunos de ellos amenazando a miembros de la institución o protagonizando actos violentos en el estadio Vila Belmiro.
Conmemoración triste
El descenso tiene otro aspecto doloroso: tiene lugar a pocos días de que se cumpla el primer aniversario de la muerte de Pelé, fallecido el 29 de diciembre de 2022 a los 82 años.
‘O Rei’ hizo mundialmente famoso a los albinegros y les dio sus mejores momentos: seis de sus ocho ligas (1961, 1962, 1963, 1964, 1965, 1968), dos de la tres Libertadores y las dos Intercontinentales, ambas en 1962 y 1963, además de varios títulos estatales.
El ’10’ disputó prácticamente toda su carrera en el ‘Peixe’ (1956-1974), salvo sus últimos años, cuando firmó por el New York Cosmos de Estados Unidos, donde se retiró en 1977.
Varias décadas después, aunque con menos triunfos, Neymar recogió el testigo del que muchos consideran el mejor futbolista de la historia.
Estuvo en la conquista de la Copa do Brasil-2010, la primera del equipo, y encantó en la tercera Libertadores, en 2011, y en la Recopa Suramericana, en 2012. Pero no pudo conquistar la liga, que el elenco alzó por última vez en 2004.
En 2013 partió para el Barcelona y luego al París Saint-Germain. Al igual que Pelé mientras vivió, suele estar pendiente del club y ha dicho que sueña con retirarse defendiendo esa casaca.
«Volveremos a sonreír», escribió Neymar en una historia publicada en Instagram minutos después del pitazo final cuando el Santos descendió a Segunda División.
Desde su marcha, el Santos se contentó apenas con vencer un par de Campeonatos Paulistas (2015, 2016) y con dos subcampeonatos del Brasileirao (2016, 2019) y uno de la Libertadores (2020).