Chase Carey, presidente y CEO de la Fórmula 1, donó un millón de dólares para financiar medidas para aumentar la diversidad y la inclusión en este deporte, una iniciativa que está en consonancia con la campaña #WeRaceAsOne, presentada a principios de esta semana.
«Como deporte verdaderamente internacional, podemos marcar la diferencia utilizando nuestra voz y determinación para abordar problemas vitales. Somos un deporte que representa a millones de aficionados en todo el mundo y debemos asegurarnos de que somos tan diversos e inclusivos en nuestra propia comunidad como las comunidades a las que servimos en todo el mundo», apunta la competencia en una nota.
«Reconocemos plenamente que la Fórmula 1 debe ser más inclusiva y diversa. Queremos asegurarnos de brindarles a las personas de todos los orígenes las mejores oportunidades para trabajar en la Fórmula 1 independientemente de su género, etnia, orientación sexual o habilidades físicas», dijo Carey.
«Estamos dando el paso inicial de crear una base para apoyar oportunidades educativas y de empleo, clave en la Fórmula 1, que dará a los talentos poco representados la oportunidad de trabajar en este increíble deporte y construir una carrera emocionante», añadió.