Si pensaron que el venezolano Gerardo Parra dejaría “Baby Shark” en Washington se equivocaron. El martes el jardinero se presentó con su nuevo equipo en Japón, los Gigantes de Yomiuri, con dos tiburones en las manos y de fondo sonaba la pegajosa canción.
Parra, que firmó por una temporada y dos millones de dólares, se hizo viral en las redes sociales y en toda la ciudad de Washington en la pasada campaña, cuando formó parte de los Nacionales, por colocar la canción infantil Baby Shark en honor a su hija.
Los Gigantes no perdieron tiempo y pondrán a la venta pequeños guantes en forma de tiburón, así lo anunciaron a través de su cuenta en Twitter.
El patrullero se tomó en serio la canción y tuvo tanto impacto en su vida que tiene tatuado un escualo junto al trofeo de campeones de la Serie Mundial de 2019.
Además, cada vez que utiliza un traje formal en eventos deportivos, el pisa corbata del marabino es un tiburón.
Por otro lado, Parra durante su carrera como grandeliga dejó promedio de .276, con 88 cuadrangulares, 522 carreras impulsadas, 620 anotadas, 96 bases robadas y 1.312 indiscutibles.
Dentro de sus premios se encuentran dos Guantes de Oros, un Jugador del Año por la marca Wilson en la Liga Americana y luego logró la misma distinción en la Liga Nacional.