
El español Pello Bilbao (Astana) ganó este sábado al esprint y por delante de su compatriota Mikel Landa (Movistar) la vigésima etapa del Giro de Italia, entre Feltre y Croce d’Aune-Monte Avena, de 194 kilómetros, en la que el ecuatoriano Richard Carapaz (Movistar) mantuvo la maglia rosa a falta de la contrarreloj final de este domingo en Verona.
Carapaz llegará a la contrarreloj individual que pondrá fin al Giro con una ventaja de 1 minuto y 54 segundos sobre Vincenzo Nibali (Bahrein) y 2 minutos y 53 segundos sobre Landa, que se hizo este sábado con el podio en la general.
La última etapa en línea del Giro de 2019 vio el triunfo de un Bilbao que fue protagonista desde el comienzo y que, tras resistir a 5 subidas de alta intensidad, tuvo las fuerzas para batir a Landa y acabar en 5 horas, 46 minutos y 2 segundos.
Fue una etapa de alta exigencia, con los corredores que enfrentaron 5 subidas divididas por pocos kilómetros, con la Cima Campo (segunda categoría, de 18,5 kilómetros al 5,7% de pendiente), el Passo Manghen (1a, 18,9 kilómetros al 7%), el Passo Rolle (2a, 20 kilómetros al 5%) y la subida final al Monte Avena (2ª, 6,9 kilómetros al 7.1%).
Un grupo de 12 corredores, con los españoles Bilbao y Nieve y el costarricense Andrey Amador (Movistar) apretaron con fuerza desde el comienzo y tomaron una ventaja de 3 minutos sobre el pelotón tras la primera subida a la Cima Campo.
Con Carapaz sólidamente en el grupo, el que más sufrió en las primeras escaladas fue Nibali, quien perdió metros en la Campo a causa de un problema mecánico y que sufrió mucho al llegar al Manghen, Cima Coppi de esta edición (2.628 metros), donde sus opciones parecían acabarse.
El italiano Fausto Masnada (Androni) fue protagonista con un gran ataque en el Manghen y llegó primero a la cumbre, por delante de los demás atacantes. Detrás de un gran Miguel Ángel López y acompañado por Landa, Carapaz les alcanzó y pudo dejar atrás a un Nibali que fue obligado a una bajada espectacular para recuperar margen.
Gracias a su talento en la bajada, el «Tiburón» y Roglic volvieron a juntarse al grupo de la maglia rosa y de allí la etapa vivió un momento de estudio. Era la calma antes de que llegara el tramo decisivo de este Giro de Italia. Bilbao, el estonio Tanel Cagert (EF), Nieve, el eritreo Ama Ghebreigzabier (Dimension Data), Eros Capecchi (Quick-Step), el francés Valentin Madouas (FDJ), el irlandés Eddie Dunbart (Ineos) y Giulio Ciccone (Androni) lucían una ventaja de 3 minutos tras la subida al Passo Rolle, a falta de 50 kilómetros para la meta.
Lo incrementaron a 3.45 a 30 kilómetros del final, pero poco a poco el equipo Astana y Movistar aumentaron el ritmo. Protegido por sus compañeros, Carapaz se acercó a los líderes y llegó a la escalada al Colle d’Aune a menos de dos minutos de distancia. En frente al grupo Ciccone, Bilbao, Kangert y Madouas intercambiaron ataques, con el francés que ganó unos 100 metros, mientras que Carapaz, Nibali, Landa y Roglic seguían pegados y controlándose. A 13.3 kilómetros del final, llegó el empuje de Supermán López, quien apretó con fuerza y sacudió a un grupo que sin embargo logró aguantar.
El 102 Giro de Italia concluirá este domingo con una contrarreloj individual de 17 kilómetros que saldrá de Verona Feria y que acabará en la icónica Arena, donde se coronará al campeón.
Pese a no ser un especialista de las contrarreloj, Carapaz sale con una considerable ventaja para hacer, una vez más la historia de su país, y regalarle el primer triunfo en Giro de Italia.
Bronca en la carretera. El colombiano Miguel Ángel «Supermán» López (Astana) golpeó repetidamente este sábado a un aficionado que le derribó en una bajada a pocos kilómetros del final de la vigésima etapa del Giro de Italia y que le impidió pelear por las primeras posiciones tras una prueba de 194 kilómetros y 5 escaladas.
López, que había sido protagonista en esta etapa con una larga serie de ataques en las subidas a la Cima Campo y al Passo Manghen, fue derribado en la última bajada, a unos 15 kilómetros de la meta de Croce d’Aune-Monte Avena.
Tras caerse, el corredor colombiano se levantó y golpeó repetidamente en la cara y en el cuerpo al aficionado, antes de que un compañero del equipo Astana le entregara su bicicleta para permitirle proseguir la carrera. Supermán López era sexto en la clasificación general, a 5 minutos 33 segundos del líder, el ecuatoriano Richard Carapaz, y su caída puso fin a sus opciones de pelear por la zona noble de la tabla final del Giro de Italia.
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