Desde el temporizador de pitcheo hasta la eliminación de formaciones especiales en el cuadro interior, las Grandes Ligas arrancan su temporada con novedades que buscan agilizar el juego y que en la pretemporada recortaron la duración de los partidos 26 minutos, según la MLB.
Tras años de debate, la MLB, la liga estadounidense más vinculada a la tradición, decidió aportar un cambio histórico. Ahora tendrá un temporizador que marcará los tiempos para ejecutar las acciones del juego en la temporada.
Con relojes colocados detrás del plato y en los jardines, los bateadores tendrán 30 segundos para presentarse a la caja de bateo entre turnos.
En el caso del lanzador, tiene un límite de 15 segundos para lanzar con bases vacías y de 20 cuando tenga corredores en las bases. De lo contrario se les cargará un pitcheo malo o bola.
El bateador deberá estar listo para jugar cuando el cronómetro de pitcheo marque los ocho segundos para finalizar el lanzamiento. De no hacerlo, se le señalará un strike.
Este temporizador busca reducir el tiempo de juego, que la pasada temporada fue de 3 horas, 3 minutos, 44 segundos.
En los partidos de pretemporada de 2023 se produjo una reducción de 26 minutos por encuentro, en relación con la del año pasado. Así lo indicó la MLB.
Un lanzador puede reiniciar el reloj de pitcheo bajando del montículo. Cuando tiene corredores en las bases, lanzando o virándose a la base donde se encuentra el corredor, pero ambas acciones están limitadas a dos oportunidades por bateador. De violar esta norma en tercer intento le será otorgado una base extra al corredor.
Otro de los cambios consiste en que las solicitudes de revisión de jugadas deben ser solicitadas en un máximo de 15 segundos. No en 20 como la pasada campaña.
Con las limitaciones en la cantidad de veces que un lanzador puede virarse a las bases en busca de retirar un corredor y el incremento del tamaño de la almohadilla de 15 a 18 pulgadas, la MLB aspira a que se incrementen los intentos de robo de bases en la temporada, lo que brindaría mayor dinamismo al juego.
Limitación a las formaciones defensivas
La MLB impuso además una limitación de las formaciones defensivas para esta temporada. Hasta el año pasado se permitía que hasta cuatro jugadores pudieran defender a un mismo lado del cuadro interior. Eso disminuía la posibilidad de que los bateadores pudieran realizar una ofensiva más efectiva.
Ahora el reglamento obliga a los equipos a mantener a los jugadores de cuadro interior en sus posiciones, sin movilizarse a un mismo lado. Eso abre un mayor espacio para que los bateadores puedan colocar más pelotas en juego.
La única excepción a esta regla es que los dirigentes podrán movilizar a uno de sus jardineros de esquina y cargarlo hacia la zona que con mayor frecuencia le pega el bateador a la pelota, pero bajo riesgo de dejar ese jardín sin un defensor.
Entre las demás modificaciones al reglamento, la utilización de jugador de posición, que no sea pitcher, como lanzador estará sujeta a que el juego se encuentre en entradas extras, cuando su equipo va perdiendo por al menos ocho carreras o ganando por al menos 10 vueltas en la novena entrada.
MLB aprobó además dar continuidad a la regla del corredor automático iniciando el episodio en la segunda base en los juegos que avancen a entradas extras, con el objetivo de que los partidos finalicen más rápido.