El boxeador mexicano Saúl Canelo Álvarez, campeón indiscutible del peso supermediano, doblegó este sábado a Gennadiy Golovkin en Las Vegas (Nevada) y zanjó a su favor esta memorable trilogía de combates ante su archirrival kazajo.
Álvarez, que había empatado con Golovkin la primera pelea y vencido por puntos en la segunda, despejó las dudas sobre su superioridad aplicando una contundente derrota por decisión unánime con una tarjeta de 116-112 y dos de 115-113.
Canelo victorioso
Canelo conservó así sus cuatro cinturones del peso supermediano (168 libras, 76,2 kg) y se redimió también de la sorprendente e inapelable derrota, la segunda de su carrera, que le asestó en mayo el ruso Dmitry Bivol.
«He pasado momentos muy difíciles de mi vida pero quiero que sepan que hay que seguir adelante», dijo Álvarez a los 20.000 aficionados, la inmensa mayoría de origen mexicano, que abarrotaron de nuevo el T-Mobile Arena de Las Vegas.
«Las derrotas son buenas, nos enseñan a aprender muchas cosas, desechar otras, y tener más humildad», reconoció Canelo, que había subido de categoría para enfrentar a Bivol en el peso mediopesado (175 libras, 79,4 kg).
Triunfo incontestable
El mexicano no pudo cumplir su promesa de noquear a Golovkin pero sí brindó un triunfo incontestable tanto a sus apasionados aficionados, que apoyaron a su ídolo en el fin de semana de festejos por la independencia de México, como a personalidades como la estrella de la NBA Stephen Curry (Warriors) o el actor Michael B. Jordan.
Canelo se aprovechó del regreso a su categoría favorita y de su mayor velocidad ante Golovkin que, a sus 40 años de edad, fue de menos a más en su estreno en las 168 libras.
La floja actuación del boxeador conocido como GGG hizo que el combate estuviera lejos de los dos trepidantes episodios anteriores, que concluyeron con polémicos veredictos que Golovkin siempre cuestionó.
Tras la última campana, ambos púgiles se abrazaron sobre el cuadrilátero y compartieron algunas palabras.
«Le di las gracias porque le dimos a la gente tres buenas peleas que quedarán para la historia del boxeo», dijo Álvarez.
El kazajo, que se queda con un balance de 42 victorias (37 nocauts), un empate y dos derrotas, ambas contra Álvarez, descartó una próxima retirada de los rings.
«Todavía tengo este fuego en mí, la pasión por el boxeo, todavía tengo cinturones en 160 libras», aseguró el kazajo en referencia a sus títulos de peso medio (160 libras, 72,6 kg) de la AMB y la FIB.
Cirugía y descanso
Álvarez consumó con éxito su primera defensa de su condición de campeón indiscutible del peso supermediano, que alcanzó en noviembre de 2021, y su próximo objetivo es tomarse la revancha ante Bivol.
Antes de ese reto, sin embargo, el mexicano avanzó que se tomará un descanso fuera de los rings en los que se someterá a una cirugía en su mano izquierda, que podría tenerle de baja entre seis y 12 semanas.
Álvarez dijo que sus problemas en la muñeca izquierda, que arrastra desde finales del año pasado, le volvieron a provocar dolor durante su combate del sábado.
«Voy a tomarme mi tiempo. Tal vez en mayo, septiembre, no lo sé», dijo sobre su fecha de regreso a la competición.
La victoria de Canelo, que se queda con un registro de 58 victorias (39 nocauts), dos derrotas y dos empates, finiquita una trilogía de trepidantes y polémicos combates que convirtieron esta rivalidad en una de las más atractivas de los últimos años en el boxeo.
Las dos primeras peleas fueron extremadamente igualadas y muchos expertos y aficionados se quedaron con la sensación de que el kazajo resultó vencedor.
La animadversión personal entre ambos púgiles se recrudeció con la sanción de seis meses que recibió Canelo por dar positivo por clembuterol, que el púgil atribuyó al consumo de carne contaminada, que retrasó varios meses su segundo combate de 2018.