Bolivia venció 1-0 a Perú este domingo en los 3.600 m de altitud de La Paz, por la quinta fecha de la eliminatoria mundialista sudamericana, un resultado que le proporcionó una bocanada de oxígeno para continuar luchando por un boleto a Catar-2022.
Ramiro Vaca marcó el único tanto del partido a los 83 minutos tras un lanzamiento de primera desde fuera del área.
El partido ganó en intensidad en la segunda mitad, después de que la Verde adoptara un planteamiento más ofensivo tras encontrarse con una selección inca muy bien plantada, que recortó todos los espacios y que en algún momento tomó la iniciativa.
Con este resultado, Bolivia ascendió momentáneamente al octavo lugar con 9 puntos, mientras que Perú se estancó en la séptima casilla con 11 unidades.
El jueves, por la duodécima fecha, Bolivia volverá a ser local frente a Paraguay, mientras que Perú visitará a Argentina.
Equilibrio de Bolivia
El equipo boliviano trató de imponer desde un principio un juego dinámico, con envíos a espaldas de los zagueros peruanos, pero se encontró con una sólida estructura defensiva del plantel incaico, que salía a jugar preservando el balón y que respondía ejerciendo presión para frenar las salidas del equipo local.
Con los pocos espacios que le dejaba el seleccionado peruano, Bolivia apelaba a los pelotazos, a los centros infructuosos y a los disparos de media distancia, pues apenas podía aplicar un juego colectivo donde primara el dominio de la pelota o avances veloces que asfixiaran al rival.
Se trató de un partido vivido con mucho nerviosismo, a tal punto que en los 20 primeros minutos del lance, la selección boliviana ya tenía dos amonestados con tarjeta amarilla: el volante Moisés Villarroel y Adrián Jusino.
Pese al martilleo boliviano sobre el área de Pedro Gallese y a contadas jugadas de riesgo, Perú tomó la iniciativa y empezó a adueñarse del partido llegando con mayores posibilidades con base en rápidas salidas.
A los 27 minutos, Yoshimar Yotún lanzó un disparo que salió escasamente desviado, tras una articulada jugada entre Gabriel Costa y Christian Cueva. Un poco más tarde, los incaicos volvieron a llegar exigiendo a Carlos Lampe y a los 34 minutos el portero boliviano volvió a salvar a su equipo desviando un envenenado disparo de Marcos López.
Con la suerte de Vaca
La selección boliviana inició el segundo con una actitud distinta, aprovechando que Perú abrió sus líneas. Aumentó su volumen de ataque, aunque exponiendo más corazón que fútbol.
Gallese se erigió en héroe a los 50 minutos con dos tapadas consecutivas, ante sendos remates de Carmelo Algarañaz y Marcelo Martins Moreno.
A los 75 minutos, Bolivia fue presa de su propio nerviosismo, cuando Henry Vaca quedó en inferioridad numérica tras la expulsión de Henry Vaca, por una torpe falta contra un adversario.
El momento culminante del lance ocurrió en el minuto 83 cuando el recién ingresado Ramiro Vaca anotó el gol boliviano con un remate desde fuera del área ante un rebote cedido por Gallese.