La tranquilidad de Yusmeiro Petit resultaba pasmosa. En un día de visita al Rogers Centre, en Toronto, el lanzador venezolano caminaba con confianza. La seguridad en sí mismo se le notaba. No lucía como un pítcher que vivía su primer año de experiencia en la Liga Americana, circuito en que, tradicionalmente, los monticulistas son más castigados por los bateadores que en la Nacional.
«La diferencia que veo es que hay un bateador más y, claro, es de poder”, comentó el zuliano, cuando se le interpeló sobre la dificultad de lanzar en el nuevo circuito. “Pero son cosas que hay que aprender a manejar. Solo hay que pensar en mantener la mente en el juego. A veces puedes lanzar 2 o 3 innings, porque no tienes que batear y no te van a sacar, como en la Nacional”.
En este momento Petit, el comodín de los Angelinos de Los Ángeles de Anaheim, no es un brazo del común, por eso puede romper con cualquier parámetro que exista. Es el serpentinero con más innings trabajados como relevista en la temporada, con 81.0, y aun así tiene la mejor efectividad (2.22) entre los bomberos que no fungen como cerradores fijos de sus equipos.
De los 13 brazos que amanecieron ayer con al menos 70.0 capítulos desde el bullpen, Petit posee el segundo mejor WHIP (promedio de hombres embasados por cada episodio), con 0.90. Solo el taponero de los Piratas de Pittsburgh, el también venezolano Felipe Rivero, luce un mejor guarismo: 0.87.
Es bien sabido que las grandes claves del derecho de 32 años de edad son su comando y de un cambio de velocidad que obliga a los adversarios a darle mal a la bola. De hecho, con el pitcheo lento ha producido 46.03% de roletazos y también tiene un buen porcentaje de swings fallidos (23.33%) con el envío, señala brooksbaseball.com.
Aunque los números muestran algunas de sus virtudes, es mejor que él mismo diga por qué tiene una de sus mejores campañas en las mayores:
“He tenido la constancia para mantenerme bajo en la zona, eso es lo que he tratado de hacer”, aseguró. “A veces el cansancio pega y se pueden dejar algunos lanzamientos en la zona de poder y eso es lo que se trata de evitar”.
Las palabras resultan sabias para alguien que se mantiene alerta por la actual tendencia de dominio de bateadores sobre lanzadores. Y, según él, mucho tiene que ver con la pelota que “se siente más apretada” y eso ha endurecido las costuras. “De alguna manera eso no beneficia a los lanzadores”, comentó.
La campaña 2014 fue inolvidable para Petit. Ganó su único anillo de Serie Mundial, con los Gigantes de San Francisco, y puso su nombre entre los récords de las Grandes Ligas al lograr 46 bateadores retirados de forma consecutiva. No obstante, en números globales, esta temporada puede ser vista como mejor. Posee foja de 5-0, 2.12 de efectividad, con un juego iniciado y 3 salvados. Y, lo mejor para él, es uno de los consentidos del manager Mike Scioscia.
EL DATO
No es la primera vez que Yusmeiro Petit atrae los reflectores hacia él, a pesar de ser un relevista largo. En 2014 logró un difícil récord en las mayores: retiró a 46 bateadores de forma consecutiva