El proceso de rehabilitación de Miguel Cabrera avanza como esperaban los médicos y el jugador estará listo para regresar a la acción en los entrenamientos primaverales, aseguró este martes el alto mando de los Tigres de Detroit.
Al Ávila, gerente general de los bengalíes, aseguró al periodista Jon Morosi, de MLB Network, que todo marcha bien con la recuperación del inicialista nacido en Maracay, que perdió los últimos tres meses y medio de la temporada 2018 por una severa lesión.
El aragüeño fue operado para reparar un desgarre en el ligamento del bíceps izquierdo, inconveniente que ocurrió al hacer swing, en una acción aparentemente inocua.
El toletero derecho había recibido tratamiento un par de veces para aliviar molestias en el bíceps, antes de suceder el percance.
“Ahora mismo voy un poco lento”, declaró a finales de julio, en improvisada rueda de prensa, en Detroit. “Es duro, es muy difícil esto, pero confío en que voy a poder estar en plena forma para jugar nuevamente todos los días, a partir del Spring Training”.
Los médicos le indicaron que debía pasar cuatro meses alejado del cuarto de pesas y sin poder hacer swing. Se espera que en diciembre pueda empezar a batear.
Cabrera buscaba el hit que le permitiera igualar los 2.677 cohetes de Luis Aparicio, dueño del segundo lugar de todos los tiempos entre los venezolanos, al momento de romperse el tendón.
Dejó promedios, con .299/.395/.448 y únicamente pudo disputar 38 cotejos con los bengalíes, debido a dolores en varias partes del cuerpo, incluyendo la corva, la cadera y la parte baja de la espalda.
Esta fue la primera vez desde 2003 que Cabrera no completó más de 100 cotejos en una zafra. Sus totales de 3 jonrones y 22 empujadas también marcaron mínimos en su trayectoria, incluyendo su año de novato.