Las Águilas del Zulia y los Cardenales de Lara, los dos equipos finalistas en la temporada 2016-2017 de la LVBP, firmaron este miércoles un mega cambio de peloteros, por el que los rapaces adquirieron a cinco jugadores y los pájaros rojos recibieron a tres.
El patrullero Jairo Pérez es la figura de mayor trayectoria entre los ocho involucrados en la transacción, que fue anunciada en horas de la mañana por Luis Amaro, gerente deportivo de los zulianos, a través de su cuenta personal en Twitter. El prospecto Anthony Jiménez, un joven centerfielder, posiblemente sea el principal talento involucrado en el canje.
Pérez, los pitchers Richard Castillo y Pablo López, el receptor Luis Álvarez y Wilyer Abreu, quien no tiene participación en el beisbol organizado, son ahora integrantes de los aguiluchos.
Jiménez, el relevista Marcos Tábata y el infielder Erick Salcedo forman ahora parte del roster de los crepusculares.
El departamento de prensa de ambos equipos confirmó el pacto, poco después de que Amaro rompiera el celofán de la noticia.
El bate de Pérez agregará poder al lineup de los fronterizos. Dio 9 cuadrangulares en la campaña 2015-2016, la última en la que jugó sin lesiones, y hoy batea para .327/.357/.484 en México, con los Generales de Durango.
Él y Castillo, un serpentinero abridor y apagafuegos, que desde hace dos años milita en circuitos independientes, fueron sancionados por su papel en los actos violentos ocurridos durante la final, en el estadio Luis Aparicio El Grande, que ahora será su casa.
López es un monticulista de 21 años de edad, que está en la fase inicial de su carrera. Actúa en Clase A avanzada.
Jiménez y Salcedo también son reclutas en formación. El jardinero milita en Clase A media, donde batea para .316/.377/.478, y el campocorto vive una buena cosecha en Doble A.
Tábata llegó a ser un apagafuegos muy útil con su antiguo elenco, pero en los tiempos recientes ha sufrido problemas físicos y ha trabajado en Italia y otras ligas independientes.