BÉISBOL

Un día mágico

por Avatar EL NACIONAL WEB

Una tarde de récords y una noche de hazañas. La expedición venezolana que participa en las Grandes Ligas vivió el viernes uno de sus días más luminosos en los últimos años, al escribir varios de sus miembros sendos capítulos brillantes con el madero.

Desde la explosión de Willson Contreras, que disparó cuatro extrabases y empujó siete carreras, hasta el inusual estreno de Luis Guillorme, pasando por las seguidillas que mantienen Wilson Ramos y Odúbel Herrera, ocurrieron hechos que exigen titulares de prensa y primeras planas.

Contreras conectó se convirtió en el tercer catcher en la historia de las Grandes Ligas que batea cuatro extrabases y empuja siete carreras en el mismo encuentro, al largar dos tubeyes y dos jonrones, incluyendo un Grand Slam.

El motor de búsqueda de Baseball Reference permite conseguir a los únicos receptores que han vivido una cosecha semejante, antes que el carabobeño: nada menos que el inmortal Mike Piazza, en 1995, con los Dodgers, y George Mitterwald, en 1974, con los Cachorros de Chicago.

Contreras también forma filas con los oseznos.

Es la primera vez que un criollo, sin importar la posición, consigue cuatro extrabases y siete empujadas en un mismo choque. Además, es la cuarta ocasión que un careta del patio remolca siete rayitas, un récord que ahora comparte con Víctor Martínez (el primero que lo hizo, en 2004) y Ramón Hernández (dos veces, en 2005 y 2006).

Guillorme, entretanto, fue llamado a la acción con los Mets e hizo su debut en las Mayores, de un modo muy peculiar entre sus compatriotas. Fue empleado como corredor emergente, pisó el plato y pasó luego a defender la tercera base contra los Filis de Filadelfia. No fue a batear ni una vez.

Apenas Luis Ugueto, en 2003, con los Marineros de Seattle, y Eider Torres, en 2008, con los Orioles de Baltimore, se estrenaron en la gran carpa con una carrera anotada antes de tomar su primer turno al bate.

Guillorme, además, entró a la lista de venezolanos que han jugado en la MLB antes que en la LVBP, un grupo que ya va por 28 nombres y que desde 2015 ha agregado nada menos que a 14 nuevos miembros, la mitad del listado total. No terminan aquí las rarezas con el caraqueño, que es uno de tres jugadores que han pasado por el big show sin jamás haber firmado con equipos de la pelota local.

Ramos puso su parte en la notable jornada al llegar a 17 juegos consecutivos dando al menos un imparable, la cadena más extensa para un criollo esta temporada y la tercera más extensa en la historia de los Rays de Tampa Bay, empatando a Aubrey Huff.

El nativo de Valencia quedó muy cerca del récord para la franquicia: Quinton McCracken logró 18 encuentros al hilo dando imparables en 1998 y Jason Bartlett sumó 19 en 2009.


Odúbel Herrera

en la ruta de Carew y Parker

Odúbel Herrera puso de su parte para completar un viernes brillante para Venezuela en las Grandes Ligas, al tomar un boleto y disparar dos imparables lo que le convirtió en el quinto criollo con una seguidilla de al menos 40 cotejos y llegar a 40 juegos consecutivos embasándose por hit, boleto o pelotazo en las Grandes Ligas.

Únicamente Andrés Galarraga (41 entre 1996 y 1997), Víctor Martínez (44 entre 2005 y 2006), Miguel Cabrera (44 en 2013) y Bob Abreu (48 entre 2000 y 2001) formaban parte de esa lista.

El zuliano, además, puso su average en .360, líder en la Liga Nacional. Ya fue campeón bate en la LVBP y vuela bajo la sombra de los legendarios Rod Carew y Dave Parker, quienes ganaron el título de bateo en Venezuela y también en las Mayores.