Dave Dombrowski, gerente general de los Medias Rojas de Boston, fue despedido este lunes tras un año que deja mucho que pensar sobre sus decisiones en la temporada muerta.
Dombrowski llegó a Boston en un momento negativo para el equipo, se encontraba con contratos de muy alto costo y los jugadores “no valían esa cantidad”, como expresó quien fue gerente de los Patirrojos.
Pero esta zafra, luego de titularse como campeones de la Serie Mundial, se encuentran en el tercer lugar de la División del Este de la Liga Americana.
De perder este lunes ante su rival histórico, los Yanquis de Nueva York, no tendrían oportunidad alguna de ganar el banderín y solo les quedaría el comodín, que están a 8 encuentros de esa plaza.
Los aficionados culpaban al gerente por no haber contrato a peloteros que aportaran al momento de estar en juego. Por lo contrario, dejo ir a su cerrador y a dos jugadores que eran de vital importancia en su cuerpo de relevistas.
“Me acabo de enterar y estoy muy sorprendido, asombrado. Ahora mismo, no tengo mucho que decir. Hablaremos un poco más mañana. Pero, él me dio la oportunidad de trabajar aquí y ser mánager de Grandes Ligas”, expresó Alex Cora, manager de Boston.
Luego de ganar el banderín tres años consecutivos, por primera vez en la historia, ahora se encuentran con un pie en el precipicio.
Silla caliente para Cora
Al mánager se le tuvo que encender las alarmas, luego de despedir al gerente el próximo que queda para culpar es el mandamás del equipo.
Cora, en su segundo año como dirigente, está teniendo un año para el olvido. Sus abridores no están dando la talla y los relevistas son intermitente.