Pocas veces un equipo celebra después de una derrota. Parece algo ilógico pero en deportes ocurre, como en la jornada de ayer de la Liga Profesional de Baloncesto.
Cocodrilos de Caracas fue aplastado por su similar de Gigantes de Guayana 71-54 en el primero de la serie en el Parque Naciones Unidas, y aun así pudo obtener la clasificación matemática a la postemporada.
Todo eso después del triunfo de Panteras de Miranda en su vista a Maracay frente al anfitrión Toros de Aragua.
Los astados figuran en el quinto y último lugar en la tabla de clasificación de la conferencia occidental con apenas siete lauros. Si logran ganar todos los compromisos que les faltan de ronda regular (12) solo podrían juntar 19 victorias, una por detrás de los saurios, que ya suman 20.
Así que por undécima campaña consecutiva los capitalinos acceden a la segunda fase del torneo y tendrán la oportunidad de comenzar su camino a la revalidación del título.
Sin embargo, no todo debe ser festejo en el pantano capitalino. La manera como se cayó frente a los guayaneses no dejó nada contento a Néstor Salazar y arrojó números negativos históricos para la franquicia caraqueña.
Los guayaneses, que llegaban al partido en uno de sus peores momentos de la zafra, con cinco derrotas en sus últimas siete presentaciones, pueden regocijarse de que son el primer conjunto que logran dominar a Cocodrilos desde el propio comienzo y hasta el final.
Además, la defensa limitó a 54 puntos a los vigentes campeones, cifra que de acuerdo con el estadístico Pedro Marrero es la más baja en la historia de la divisa.
Una de las claves de los colosos estuvo en el dominio de la zona interna, en la que lograron endosarse la alta suma de 54 rebotes, de los cuales 25 fueron ofensivos.
El aporte colectivo, también fundamental a pesar de que solo tuvo un par de jugadores por encima de los dobles dígitos: Quinnel Brown con 14 puntos y el criollo Yorbi Umbría con 10 unidades.
Gigantes dejó su récord ahora en 12 lauros por 13 descalabros para ubicarse terceros en la cerrada conferencia oriental, que lideran Guaiqueríes de Margarita y Bucaneros de La Guaira.
Paradójicamente, Panteras de Miranda, archirrival de ciudad de Cocodrilos, fue el que terminó otorgándole la clasificación. Lo hizo después de batir a Toros de Aragua 82 por 73.
El debut del estratega español Manuel Povea Molinero al frente de la manada felina no pudo ser mejor, luego de acabar con la racha adversa de seis derrotas consecutivas.
Panteras contó una vez más con Trey Gilder como valuarte ofensivo de un buen desempeño colectivo, que tuvo hasta a cuatro jugadores por encima de la decena de tantos.
Gilder totalizó 21 contables y 7 rebotes.
Los selváticos, pese a la alta cantidad de derrotas, aún se mantienen con chance de acceder a la segunda instancia del campeonato por lo reñida que se ha tornado la conferencia oriental.
Ocupan el último lugar pero acechando el cuarto puesto, actualmente en poder de Marinos de Anzoátegui.
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