Con una explosión de júbilo y fuegos artificiales, Australia celebró este miércoles la «histórica» elección de la ciudad australiana de Brisbane como la sede de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de 2032.
«Es un día histórico no solo para Brisbane y (el estado de) Queensland, sino para todo el país», dijo con «orgullo» el primer ministro australiano, Scott Morrison, en un comunicado conjunto con su titular de Deportes, Richard Colbeck, en el que destacó la contribución que tendrá para la economía de Australia.
«Queensland, lo hicimos», remarcó desde Tokio la jefa de Gobierno de este estado, Annastacia Palaszczuk, en Twitter, donde compartió imágenes en vivo de los fuegos artificiales que adornaron el cielo de Brisbane, la capital de Queensland.
En el centro de Brisbane centenares de personas con ropas y mascarillas faciales verdes y amarillas, los colores de la selección olímpica, celebraron el anuncio en una fiesta popular.
Los Juegos Olímpicos de Verano de 2032 se realizarán en 21 sedes en Brisbane, así como en los turísticos balnearios de Gold Coast, unos 79 kilómetros al sur, y Sunshine Coast, 105 kilómetros al norte de la capital del estado de Queensland, una región minera y turística a la vez.
Brisbane -la tercera urbe de Australia organizadora de los Juegos tras Melbourne en 1956 y Sídney en 2000- acogería estos Juegos de Verano entre el 23 de julio y el 8 de agosto de 2032, mientras que los Paralímpicos serían entre el 24 de agosto y el 5 de septiembre de ese año, cuando las temperaturas oscilan entre los 21 y 24 grados.