Unos toman la iniciativa con toque y ataques filosos; otros solo intentan resistir. Conscientes de sus diferencias, los técnicos de las selecciones que se enfrentan en la Copa América-2021 despliegan estrategias para explotar a sus figuras o, a la inversa, acortar la brecha con blindajes defensivos.
La primera fecha del torneo iniciado el domingo en Brasil, como antes en eliminatorias, dio cuenta de estos duelos de pizarrón, aunque esperables, siempre desafiante para sus jugadores.
«Cada quien se defiende con lo que puede», reconoció el técnico del combinado boliviano, César Farías, preguntado tras arrancarle un empate a Chile hace pocos días en el premundial. «Los italianos ganaron un Campeonato del Mundo así», añadió, al celebrar un punto de oro contra la Roja de Alexis Sánchez y Eduardo Vargas.
Luis Prats, periodista uruguayo y autor de dos libros sobre la selección Celeste, dijo que «es tan viejo como el fútbol que muchos equipos busquen un mejor resultado ante las disparidades de fuerzas metiéndose atrás». Pero eso es «más notorio en las eliminatorias sudamericanas, donde la condición de local es muy gravitante, no solo por lo deportivo sino por aspectos geográficos».
En la Copa América, que salvo contra el dueño de casa se juega en campo neutral, «se veían partidos más abiertos, pero algunas selecciones han mantenido esas estrategias».
La Copa América de Venezuela
Aunque difícilmente en cualquiera de esas instancias Venezuela hubiera salido a presionar al local, la Vinotinto se le plantó a Neymar y los suyos con una barrera de cinco en el fondo en el debut de la Copa.
El seleccionador José Peseiro trazó un repliegue con punta que contuvo lo que pudo. Así, mermada por un brote de covid y varios debutantes, logró limitar a un 0-3 lo que algunos anticipaban como goleada histórica.
«Todos pensábamos que iba a ser peor», dijo Peseiro tras un compromiso que solo buscaba dignificar, sin ocultar su orgullo por una derrota digna.
Aun antes de la expulsión de Jaume Cuellar al 45+8, Bolivia se mantuvo en su campo contra Paraguay en el encuentro del lunes y tampoco pudo resistir la superioridad del rival, que remontó un gol de penal con un 3-1.
En el caso de Ecuador, derrotado por Colombia con un gol de laboratorio, el entrenador Gustavo Alfaro está imprimiendo un estilo de juego más vertical. Con menos de un año al frente de la Tricolor, el extécnico de Boca Juniors dijo en una entrevista en el sitio de FIFA que sus jugadores «no deben temer jugar con la defensa adelantada». En la misma nota se preguntó: «¿Dónde está escrito que no podemos ganar la próxima Copa América?».
Pasar la muralla
Los bloqueos para frenar a Neymar, Lionel Messi o la dupla charrúa de Luis Suárez y Edinson Cavani ponen presión sobre sus conductores, desafiados a armar esquemas para impulsarlos. Incluso cuando los tres favoritos en este certamen ensayan posiciones en vistas a Catar-2022.
Para Tite, conductor de un equipo que construye juego desde atrás, la prueba es abrir espacios y llegar hasta a ‘Ney’, su jugador impredecible. «Estructuramos el equipo para que él reciba menos balones, pero de una forma más eficiente para la creación», explicó el entrenador. Al activarlo en una zona adelantada, «queda más protegido» de marcas duras por temor a la infracción.
Hasta ahora, el planteo le dio al astro un gol y una asistencia. Pero Tite quiere pulir la eficiencia y probar alternativas tácticas en un equipo sólido que no cautiva.
Vicente Muglia, analista táctico del diario argentino Olé, indica que, por lo visto hasta ahora en la Copa y al margen de los condicionamientos por el covid, «si bien hay posturas distintas a la hora de jugar, hay más paridad en función de que a los equipos más desequilibrantes les cuesta marcar la diferencia».
Es lo que le está faltando a Argentina de Lionel Scaloni, quien se dijo tranquilo después de un estreno con empate ante Chile, el tercero consecutivo contando las fechas recientes de Eliminatorias. «Estaría preocupado si el equipo no generara situaciones de gol», dijo el técnico albiceleste, confiado en que se darán los resultados.
Tanto el lunes como en Barranquilla, Scaloni consideró que su equipo mereció ganar. Pero él mismo lo dijo: en el fútbol eso no alcanza.
El plan para Messi
El plan del joven e inexperto DT para explotar a su astro es «buscar un contexto favorable para que Messi pueda tener libertad para moverse en la zona por la que tiene predilección, en general, desde la derecha y enganchar hacia adentro», dice Muglia.
El analista cree que Messi «está bien rodeado», sobre todo con el acompañamiento de Giovani Lo Celso, y destaca la llegada de Argentina, que sumó 18 remates en el partido contra Chile. La debilidad es, a su criterio, no controlar los partidos, con un dominio aun cuando no tiene la pelota.
Volverá a intentarlo el viernes, ante Uruguay, al que, según Prats, Paraguay y Venezuela enredaron en redes defensivas que no pudo penetrar para llegar al gol.
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