Sao Paulo y Amazonas serán los primeros estados brasileños que recibirán parte de los miles de inmigrantes venezolanos que en los últimos meses se han concentrado en Roraima, en el norte del país, según anunció este miercoles el ministro de la presidencia de Brasil, Eliseu Padilha.
Según el ministro, en los próximos 15 días el gobierno brasileño dará inicio al proceso de transferencia de venezolanos de Roraima a Sao Paulo y Amazonas y posteriormente serán trasladados a otras ciudades brasileñas.
En Brasil, el éxodo de venezolanos se ha dado sobre todo en el estado fronterizo de Roraima, uno de los más pobres del país y que ha recibido cerca de 40.000 personas procedentes de Venezuela durante el último año, aunque esa cifra puede ser aún mayor, pues se cree que muchos no llegan a registrarse.
La situación provocó que las autoridades de Roraima exigieran del gobierno federal acciones y recursos financieros para administrar la llegada de los inmigrantes venezolanos, quienes solicitaron 17.130 pedidos de refugio en la Policía Federal brasileña solo el año pasado.
El pasado día 15 de febrero, el presidente de Brasil, Michel Temer, reconoció por medio de un decreto la «situación de vulnerabilidad» en ese estado ante la llegada masiva en los últimos meses de venezolanos que huyen de la «crisis humanitaria» que atraviesa su país.
La situación generada por la creciente emigración venezolana, que tiene entre sus principales destinos Brasil y Colombia, fue tratada este miercoles por delegaciones de ambos países, encabezadas por sus respectivos cancilleres: Aloysio Nunes y María Ángela Holguín.
Brasil y Colombia se comprometieron a mantener sus puertas abiertas para los venezolanos que huyen de la crisis política, social y económica en su país y reiteraron su deseo de «una pronta solución» a la situación en esa nación.