Investigadores del Institut d’Investigació Sanitària Pere Virgili (IIPSV), el CIBER de Diabetes y Enfermedades Metabólicas (CIBERDEM) y del Hospital Joan XXIII de Tarragona identificaron en un estudio un mecanismo a través del cual los adipocitos (las células que principalmente componen la grasa corporal) producen la leptina, una de las principales hormonas que regula el apetito.
La revista Cell Metabolism publicó los resultados del trabajo en el que observaron que este mecanismo también regula el reloj biológico de las células de la grasa, informó el instituto de investigación en un comunicado el lunes.
La investigación recibió más de un millón de euros de la Fundación La Caixa y de la Agencia Estatal de Investigación y «representa un hito muy significativo», no sólo desde el punto de vista fisiológico, también para el abordaje de enfermedades metabólicas como la obesidad.
La investigadora del IIPSV Sonia Fernández-Veledo explicó que, al comer, los niveles de leptina en sangre aumentan y esta hormona es responsable de mandar la señal de saciedad al cerebro.
En las personas con obesidad se produce más leptina que en las delgadas, pero, a su vez, se desarrolla un fenómeno que se conoce como resistencia a la leptina, que significa que el organismo no responde a esta hormona.
Las personas con obesidad tienen, por lo tanto, el mecanismo de saciedad alterado: «Nuestro estudio no solo demuestra el mecanismo por el cual los adipocitos producen leptina, sino también por qué la grasa de las personas con obesidad lo hace de forma excesiva», dijo.