La aplicación de videoconferencia Zoom, cuya popularidad se disparó con el aumento del teletrabajo en medio de la pandemia del covid-19, anunció medidas para reforzar su seguridad en respuesta a cuestionamientos de la justicia estadounidense, preocupada por el aumento de casos de pirateo.
En carta abierta publicada el miércoles por la noche, el jefe ejecutivo y fundador de Zoom, Eric Yuan, aseguró que la empresa usará «todos sus recursos técnicos para concentrarse en los principales problemas de confianza, seguridad y confidencialidad».
Yuan indicó que Zoom trabajará con expertos externos y usuarios para comprender y garantizar la seguridad de todos.
Anunció que está previsto organizar una presentación en línea cada miércoles para comunicar la puesta en práctica de las políticas sobre seguridad y protección de la vida privada de su comunidad.
Garantizar la privacidad y seguridad
Esos anuncios llegan tras el envío el lunes de una carta por la fiscal general del estado de Nueva York, Letitia James, que pedía a Zoom actuar para garantizar la privacidad y seguridad de sus usuarios.
La oficina del FBI en Boston dijo también el lunes que recibió «varias indicaciones de teleconferencias perturbadas por imágenes pornográficas o de odio y lenguaje amenazante».
Los casos ocurrieron mientras Zoom no solo es utilizado por muchos particulares que trabajan desde casa y ahora están en cuarentena o practican el distanciamiento, sino también por empresas y escuelas que cerraron y dan clases en línea.
Según Yuan, la plataforma registró en marzo más de 200 millones de participantes en reuniones cotidianas, gratuitas y de pago. En diciembre pasado contabilizó 10 millones.
«En este período de aislamiento, nosotros en Zoom nos sentimos increíblemente privilegiados de poder ayudarles a seguir en contacto», indicó el jefe de la empresa.
«También sentimos una inmensa responsabilidad. El uso de Zoom explotó de la noche a la mañana, superando por mucho lo que esperábamos cuando expresamos nuestro deseo de ayudar a fines de febrero. Esto incluye a más de 90.000 escuelas en 20 países que respondieron a nuestra oferta de ayudar a los niños a seguir su educación de manera remota», añadió.