Twitter decidió suspender este viernes una cuenta asociada al líder supremo iraní, Alí Jameneí, por publicar una imagen que sugiere un ataque aéreo contra el expresidente Donald Trump que reza: «La venganza es inevitable».
La cuenta @khamenei_site, que no suele funcionar como la principal del ayatolá, fue suspendida por violar las normas de la red social, entre ellas la de amenazas de violencia.
La imagen, que también ha sido compartida en la web en inglés de Jameneí, es un montaje que muestra desde el aire a una persona parecida a Trump jugando al golf y sobre él se proyecta la sombra de un avión de combate o de un dron.
Las cuentas más populares y usadas por el líder iraní no han compartido la imagen o han sido suspendidas.
Varios usuarios de la red social protestaron por la imagen hasta que finalmente ese tuit fue eliminado y toda la cuenta suspendida.
La amenaza hace referencia a la muerte hace algo más de un año del general iraní Qasem Soleimaní, que fue asesinado en Bagdad por un dron estadounidense por orden directa de Trump.
En diciembre, un mes antes de que Trump abandonara la Presidencia, que desde el miércoles ocupa el demócrata Joe Biden, Jameneí tuiteó en inglés: «Aquellos que ordenaron la muerte del general Soleimaní, así como aquellos que la ejecutaron, deberán ser castigados. La venganza sucederá a su debido tiempo».
Trump acusó al líder de las Fuerzas Quds de ser responsable de la muerte de estadounidenses y posteriormente presumió de lo acertado de su decisión de ordenar su muerte.
Irán respondió con un bombardeo a una base militar estadounidense en Irak en la que no hubo fallecidos y prometió venganza a su debido tiempo.
Trump fue suspendido de Twitter indefinidamente después de justificar el mortal asalto al Capitolio del 6 de enero por parte de sus seguidores y de haber azuzado ese enfrentamiento con acusaciones falsas de fraude electoral en redes sociales y en un discurso previo.
Twitter también borró el 8 de enero un tuit en la principal cuenta en inglés de Jameneí en la que anunciaba que no permitirán que se importen vacunas estadounidenses y británicas al país porque están diseñadas «para contaminar a otras naciones».