Según los abogados de Twitter, los analistas pagados por Elon Musk no pudieron demostrar que la proporción de cuentas falsas en la red social era «significativamente mayor» que la estimada por la plataforma, el argumento clave del jefe de Tesla para retirarse del acuerdo de compra de Twitter.
Las partes debatieron el martes lo que deben aportar en el juicio sin precedentes que se celebrará en tres semanas sobre el acuerdo de compra por 44.000 millones de dólares que el magnate no cumplió.
Los abogados del hombre más rico del mundo volvieron a exigir el acceso a más datos sobre las cuentas falsas o automatizadas, lo que constituyó el núcleo de los argumentos de su cliente para no adquirir la plataforma, y sobre los métodos de cálculo del número de «usuarios monetizables y activos diarios».
En su carta del 8 de julio en la que anunciaba la ruptura del contrato, Musk afirmaba que la proporción de spam era «muy superior» al 5% de cuentas estimado por Twitter.
Sin embargo, dos empresas de análisis de datos contratadas por el empresario, Cyabra y CounterAction, sitúan la tasa en 11% y 5,3%, respectivamente, declaró Brad Wilson, abogado de Twitter.
«Ninguno de estos informes apoya ni remotamente lo que Musk dijo a Twitter y al mundo entero en su carta del 8 de julio», dijo Wilson.
A comienzos de julio, el grupo con sede en San Francisco lanzó una demanda contra Musk, para obligarle a cumplir el acuerdo de adquisición firmado a finales de abril.
Según el consejo de administración, la proporción de spam en la plataforma es un pretexto esgrimido por el empresario que en realidad habría cambiado de opinión al ver la caída del valor de las empresas en la bolsa en los últimos meses.
Meollo del asunto
«Dejemos de lado la retórica y vayamos al meollo del asunto», exclamó la jueza estadounidense Kathaleen McCormick, tras más de tres horas de argumentos en la vista preliminar celebrada vía Zoom.
Ambas partes se acusaron mutuamente de obstrucción o abuso del privilegio abogado-cliente.
Los abogados de Musk consideran que Twitter está pidiendo demasiada información sobre sus relaciones con Peiter Zatko, el antiguo jefe de seguridad de la red social convertido en denunciante, que este verano acusó a su antigua empresa de ocultar vulnerabilidades informáticas y mentir sobre su lucha contra las cuentas falsas.
El mercado lleva mucho tiempo dando ventaja a Twitter, ya que la ley de Delaware es a priori favorable al cumplimiento de los contratos. Y la jueza que preside el caso, Kathaleen McCormick, concedió a la empresa un juicio rápido, mientras que el multimillonario quería esperar hasta el próximo año y pedía cantidades astronómicas de datos.
Pero la intervención sorpresa del denunciante añadió una nueva dimensión al caso, ya que la juez permitió a Musk incluir las nuevas acusaciones en sus argumentos.
Deben interrogar al magnate en una declaración a puerta cerrada que se ha reprogramado para los días 6 y 7 de octubre, según varias informaciones de prensa.
El juicio está previsto que comience el 17 de octubre en un tribunal especializado del estado de Delaware, en la costa este de Estados Unidos, y durará cinco días.
La batalla judicial podría desembocar en «un acuerdo, el pago de honorarios por incumplimiento de contrato, la obligación de comprar Twitter como estaba previsto y una infinidad de otros resultados», dijo Dan Ives, de Wedbush Securities, en una nota el martes.
El analista también sigue creyendo que «es posible que las partes negocien entre bastidores».