Starlink avanza con su expansión por Latinoamérica y recientemente llegó a Colombia con una oferta que ha dejado diversos comentarios, especialmente con respecto al tema de los precios. Pero lo que más se destaca es su capacidad para llevar internet de banda ancha a través de satélites a lugares remotos y rurales en cualquier parte del mundo.
Con excepción de Venezuela y Cuba, la compañía ya posee autorización para operar en casi todos los países de la región de América Latina y el Caribe como máximo para el año 2024, incluyendo territorios históricamente desatendidos como Antigua y Barbados, Trinidad y Tobago, Guyana, entre otros.
Brasil, Chile, Perú, México y más recientemente Colombia, son los primeros países en los que ya se ofrece el servicio de internet satelital de Starlink. Por su parte, el resto de los países solo está a la espera de los últimos detalles para la llegada oficial del servicio lanzado por el magnate Elon Musk, por lo que se espera que para finales de este año la mayoría de países cuenten con el servicio.
¿Qué es y para qué creó Elon Musk a Starlink?
Starlink opera como una división de la compañía aeroespacial SpaceX, las que de la mano de su fundador, Elon Musk, encontraron una oportunidad para aprovechar su tecnología y experticia para desarrollar un sistema de internet a través de satélites orbitando la Tierra. Una oportunidad perfecta para generar ingresos con otra línea de negocio diferente a los servicios ofrecidos por SpaceX.
Aunque si bien el internet satelital no es un invento reciente, Starlink se destaca por ofrecer velocidades muy por encima de la media en lugares remotos y en cualquier parte del mundo. Su misión es precisamente brindar una buena conexión (banda ancha de alta velocidad) sin importar el lugar.
«Nuestro objetivo es cubrir el planeta con conectividad de banda ancha asequible y confiable, con énfasis en comunidades en zonas remotas que tienen poco o ningún acceso a servicios de internet», dice la empresa.
Actualmente la compañía cuenta con alrededor de 3.000 satélites en la órbita de la Tierra, y su objetivo para llegar a la cobertura ideal es enviar un total de 12.000 satélites al espacio, lo que garantizaría un internet de calidad incluso en las zonas más remotas del planeta. Su servicio no solo está pensado en el sector residencial, pues la compañía espera conectar al sector marítimo, aéreo y otros tipos de industria.
América Latina: un mercado perfecto para la compañía
De acuerdo con el Banco Mundial, en Latinoamérica y el Caribe menos de 50% de la población goza de conectividad de banda ancha fija, mientras que solo 9,9% de la población tiene acceso a fibra de alta calidad en el hogar.
Aunque la brecha digital no es exclusiva de nuestra región, ese es precisamente el problema que busca atacar Starlink, por lo que América Latina, una de las regiones con mayor desarrollo en los últimos años, puede convertirse en uno de sus principales mercados.
Tener el poder de llevar de manera inalámbrica internet de buena calidad a cada rincón de la región, podría ser la principal ventaja de la compañía, pues otras empresas que ya prestan el servicio de internet satelital suelen brindar velocidades lentas y una gran latencia.
¿Quiénes se benefician con el internet satelital de Starlink?
Lo primero que vale la pena mencionar es que la oferta actual de internet satelital no es económica. En Colombia por ejemplo, las principales empresas de internet satelital exigen un contrato a 12 meses, velocidades de descarga y subida realmente modestas y un precio que ronda los 50 dólares por mes (al cambio para efectos de comparación).
En el caso de Starlink las cosas en cuanto a costos no cambian mucho, aunque sí se destaca una oferta notablemente mejor en cuanto a la calidad del servicio de internet. Vemos que en América Latina los precios oscilan entre los 40 dólares y 55 dólares por mes según el país, a lo que se debe sumar un pago único de entre 450 dólares y 500 dólares para recibir el kit de instalación, el cual incluye la antena, un router, cableado, entre otras cosas.
De acuerdo con la compañía, las velocidades promedio son de 130 Mbps, oscilando entre 50–200 Mbps dependiendo de la ubicación, lo que representa un salto significativo con respecto a la oferta actual.
Entonces, ¿quiénes se benefician? Precisamente quienes tienen el dinero suficiente para costear los gastos mensuales que cuesta el internet satelital de Starlink y durante años solo han podido acceder a servicios inestables, lentos o incluso han tenido que vivir sin ningún tipo de conectividad debido a la falta de cobertura.
Con una conectividad pobre, actividades como videollamadas con amigos y familiares, reuniones virtuales, clases online e incluso el teletrabajo, son imposibles de desarrollar. Un beneficio tan necesario en el mundo moderno que Starlink promete llevar a cada rincón del planeta.
La compañía además menciona que las aerolíneas, el sector marítimo, escuelas, y empresas en general podrán contratar el servicio que les permita conectarse en cualquier lugar del mundo y en todo momento, aunque los costos varían según las necesidades.
Por Sergio Ramos, editor en Social Geek, y contribuidor en Entrepreneur y Forbes en Español. Experto en temas de tecnología que disfruta aprendiendo sobre startups, emprendimiento e innovación.