Expertos aseguran que las redes sociales deben ser herramientas de ayuda frente al suicidio y no escenarios en los que el tema se agrave. De acuerdo con las cifras de la Organización Mundial de la Salud, cerca de 800.000 personas se quitan la vida cada año. Desde 2014, la OMS reconoce que se trata de un grave problema de salud pública que «requiere una estrategia de prevención multisectorial en los países».
Para algunas organizaciones, el impacto de las redes sociales con respecto al suicidio es desproporcionado. Por ello, las distintas plataformas crearon algunas estrategias preventivas para evitar que aumente el número de suicidios al año.
Estrategias de las redes sociales
Facebook utiliza técnicas de aprendizaje automático para identificar patrones de riesgo en los usuarios. Entre estos reconoce publicaciones con imágenes alusivas al suicidio o frases como “quisiera morir”, “ya no puedo más” o “quiero desaparecer”.
Los usuarios que quieran ayudar a otro pueden reportar los contenidos y recibirán una serie de sugerencias personalizadas. Por su parte, el usuario en el que se identificó el riesgo de suicidio recibirá, la próxima vez que inicie sesión en Facebook, una serie de consejos para que se comunique con un experto.
Facebook también ofrece un Centro de Prevención del Bullying para brindar información a padres, educadores y adolescentes mediante recursos específicos para enfrentar el ciberacoso.
Al igual que el Centro de Prevención del Bullying, Facebook tiene una Página de Prevención del Suicidio en el Centro de Seguridad de Facebook. La idea es brindar recursos con los que apoyar a las personas en situación de estrés emocional, en riesgo de suicidarse o de lesionarse a sí mismas.
Instagram, propiedad de Facebook, cuenta con un recurso similar. En julio de este año, la red social actualizó su algoritmo y fortaleció sus filtros de comentarios ofensivos. De esta forma, los comentarios que ataquen directamente la apariencia o el carácter de una persona o que sean amenazas para su bienestar son bloqueados automáticamente.
En su página de ayuda la red también despliega una serie de sugerencias dirigidas tanto a las personas con pensamientos suicidas como para los usuarios que quieran ayudar a otros.
Por su parte, YouTube tiene un apartado de seguridad especializado en suicidio y autolesión. La plataforma invita a marcar contenido en el que alguien muestre tendencias suicidas o se esté lesionando. Dentro de los recursos de seguridad de la firma existe un apartado exhaustivo con recomendaciones para padres de familia para llevar hábitos de navegación saludable y fomentar entornos más seguros.