Decenas de aplicaciones ingresan diariamente a la tienda de Android, Play Store. Algunas de ellas se posicionan como las más descargas y otras sufren con su eliminación por no cumplir con las políticas de la compañía. Durante 2017, Google borró más de 700 mil softwares, una cifra muy alta, sobre todo si se le compara con los números de 2016.
Según el reporte de la compañía, borraron 70% más de apps que el año anterior, un aumento que no dejó de sorprender a los expertos y analistas. Desde Google lo ven como algo positivo.
»No solo eliminamos más aplicaciones maliciosas, sino que también fuimos capaces de identificarlas y tomar acción de manera temprana», comentó Andrew Ahn, product manager de la plataforma.
Ahn detalló que el proceso se vio mejorado por la integración de nuevos «modelos de aprendizaje automatizado» que se implementaron dentro de la tienda de aplicaciones.
Uno de los principales problemas con los que debe batallar Google en esta situación son aquellas apps que buscan engañar a los usuarios mediante de programas que emulan a populares aplicaciones. Conocidas como «Copycat» o «versiones piratas» de las principales redes sociales o herramientas que las personas buscan para sus dispositivos.
En 2017 la compañía tecnológica liberó un software de escaneo y detección para estas aplicaciones dentro de los teléfonos de los usuarios llamado «Google Play Protect», que encuentra el malware en las aplicaciones y así alertar y eliminar todo potencial peligro para sus clientes.
Entre las aplicaciones que se eliminaron la firma destaca un episodio en agosto en que debieron finalizar 30 apps que utilizaban los teléfonos como parte de un ejército de DDoS (ataques de denegación de servicio) sin el conocimiento del usuario para «botar» servidores o sitios web.