La comisión de competencia de Australia presentó una demanda contra Google. La razón es la de presuntamente engañar a los consumidores acerca del uso, conservación y también recolección de datos personales de localización.
«Google recolectó, mantuvo y usó información personal altamente sensible y valiosa sobre la ubicación de los consumidores. Esto sin que ellos pudieran tomar una decisión informada», señaló Rod Sims, presidente de la Comisión Australiana de Competencia y Consumo, en un comunicado.
Los presuntos delitos se cometieron entre enero de 2017 y finales de 2018. Se centran en dos configuraciones: «historial de localización» y «actividad de internet y las aplicaciones», conforme a la demanda. Esta se presentó ante el tribunal federal del estado de Nueva Gales del Sur.
«La multinacional tecnológica tuvo una conducta engañosa. Hizo representaciones falsas o engañosas a sus clientes a la hora de configurar los teléfonos y tabletas que operaban con Android respecto al uso o recolección de datos de la localización», apunta el organismo oficial.
La Comisión de Australia argumenta también que Google engañó a los usuarios. Aseguran que no explicó adecuadamente que estas configuraciones debían ser apagadas manualmente si los consumidores no querían que la empresa recolectara, mantuviera e incluso usara la información sobre su localización.
Asimismo, no informó a sus usuarios que al activar la «actividad de internet y las aplicaciones» Google iba a seguir recolectado sus datos a través de los aparatos que utilizan el sistema Android.
El presidente de la comisión australiana señaló además que prosiguen las investigaciones sobre posibles abusos a los consumidores por parte de la multinacional tecnológica.