El Lago de Valencia o mejor dicho Lago de Los Tacarigua, nombrado asi por la etnia que hacia vida en sus adyacencias, es solo hoy sinónimo de tragedia y corrupción, a pesar de su gran potencial turístico y agropecuario.
Los estados Aragua y Carabobo crecieron de espaldas al lago Los Tacarigua, peor aun Aragua que creció adicionalmente de espalda al parque nacional Henry Pittier. Durante la década de los 50 y 60 que se iniciaba la industrialización del país de manera errónea se decretaron zonas industriales en las tierras adyacentes al lago y de manera inmediata dichas zonas se convirtieron en grandes barriadas donde vivian los obreros de dichas empresas. Tanto industrias como barrios populares se construyeron sin tener las previsiones técnicas necesarias y luego la super población en dichas sectores genero cordones de pobreza que concluyeron hace diez años en un lago altamente contaminado y zonas altamente inestables, no aptas para vivir y con grandes zonas anegadas.
En 2006 se producen grandes lluvias que colapsan el lago y todos los barrios del sur de Maracay se ven afectados duramente. Se inicia un proceso de desalojo e indemnización que dura 3 años por lo complejo del caso y por las grandes sumas de dinero que se desembolsaron y el tema del lago se coloca en el tapete nacional dada su gravedad y paralelamente se inician grande proyectos de ingeniera para controlar las inundaciones que lamentablemente terminaron en nada o mejor dicho terminaron en mas de mil millones de dólares en manos de la corrupción. Nunca se hizo nada y todavía hay familias en la Punta y Mata Redonda esperando su indemnización.
En el periodo de mayor bonanza económica de Venezuela se desperdicio una gran oportunidad de transformar el concepto e idea del lago de Valencia.
Hoy nos corresponde planificar muy bien cual será el futuro de este lago. Un lago que tiene una gran vocación turística y agropecuaria a la vez, ya que puede surtir grandes extensiones para el riego, pero también, se puede imitar a grandes ciudades del mundo que hacen vida a orillas de lagos y ríos. Construir centros comerciales y artísticos a las orillas del lago, un gran paseo peatonal, ciclo vías, también hoteles cinco estrellas que generan miles de fuentes de empleo.
En conclusión, en el futuro cercano debemos asumir sin complejos el reto de la transformación de El Lago Los Tacarigua en una zona comercial, ecologica, artística y productiva que genere bienestar y calidad de vida para los ciudadanos del centro del país.
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