Una persona ha sido condenada y encarcelada por abuso doméstico por primera vez en Reino Unido después de haber sido rociada con una sustancia llamada SmartWater.
Traducido literamente como «agua inteligente», se trata de un líquido forense que permanece en la piel hasta por seis semanas. Más en el caso de la ropa.
Y ahora está siendo puesta a prueba por la policía británica con miras a proteger a las mujeres y combatir la violencia de género, ya que permite vincular al atacante que ha sido rociado con la sustancia con un lote específico.
La víctima del condenado, oriunda de Yorkshire Occidental (en el norte de Inglaterra), es una de más de 200 mujeres en el país que poseen un juego completo de este líquido disuasivo en sus casas.
El kit incluye un aerosol de mano, un gel para aplicar a los picaportes y las puertas, y un mecanismo automático que despide un chorro del líquido si alguien se aproxima a la casa.
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«El abuso doméstico suele ser un delito difícil de perseguir y muchas veces los crímenes suceden a puerta cerrada. Es mi palabra contra la tuya», le dijo a la BBC el detective comisario de la Policía de Yorkshire Occidental, Lee Berry.
«Si lo marcamos de forma forense, podemos rastrear a alguien hasta un lugar concreto. Así podemos saber quién es el infractor y también quién es la víctima», continuó.
«Lo que le estamos diciendo al infractor es que, si regresa a esa dirección y viola estas condiciones, quedará marcado con elementos forenses».
Otras fuerzas policiales del país también están usando los kits —que cuestan el equivalente a un poco más de US$200 al mes por persona— como parte de su estrategia para combatir la violencia familiar y de género.
En promedio, a la policía le cuesta casi US$900 responder a un incidente de abuso doméstico, según un sondeo de crímenes en Inglaterra y Gales.
El detective comisario Berry afirmó que la fuerza se ahorraría unos US$680 por cada despliegue policial utilizando las marcas forenses como un disuasivo. El abuso doméstico afecta tanto a hombres como a mujeres.
Más seguras
La mayoría de las víctimas que usan la tecnología le han dicho a la policía que se sienten más seguras, y 94% de las personas encuestadas por las fuerzas de la policías dicen que la recomendarían a otras.
Por lo menos 20 de las 43 fuerzas de policía en Inglaterra se reúnen y comparten lo que hacen para enfrentar el abuso doméstico como parte del programa estratégico para frenar la violencia contra mujeres y niñas en Reino Unido. El detective comisario Berry espera que otras fuerzas decidan implementar la misma tecnología.
«Realmente espero que otras fuerzas de la policía vean lo que estamos haciendo aquí en Yorkshire Occidental. Cuanto más víctimas podamos proteger y hacerlas sentir seguras en sus propios hogares, mejor. Ese es el verdadero éxito de esto».
De antirrobos a antiabuso
Durante años, el SmartWater ha sido aplicado a artículos de alto valor para protegerlos y disuadir a los ladrones.
Cuando se seca el líquido es invisible al ojo desnudo, pero bajo la luz ultravioleta usada por la policía se torna fluorescente.
Cuando se encuentran los artículos robados con este sistema, tras someter las muestras a pruebas de laboratorio también se puede rastrear a los dueños.
La tecnología ya ha servido para reducir a la mitad los robos de convertidores catalíticos (piezas caras de los automóviles), según el Concejo Nacional de Jefes de Policía.
Pero su aplicación en el combate de la violencia doméstica es nueva.
El condenado, un hombre de la ciudad de Wakefield, de Yorkshire Occidental, estaba hostigando a su expareja y violando la orden de alejamiento dictada por un juez.
Cuando se apareció e intentó entrar en la casa, ella lo roció con el líquido con un atomizador desde la ventana.
El «agua inteligente» sirvió para que los agentes pudieran dar con el hombre y de manera forense colocarlo en la escena del crimen.
Fue condenado a 24 semanas de cárcel y una orden de alejamiento de dos años.
Rachael Oakley, la directora de la unidad de inteligencia de SmartWater, dice que las marcas forenses no dejan un solo elemento de duda, al contrario de otros sistemas de disuasión como los circuitos cerrados de TV.
«SmartWater está compuesta de una combinación de elementos raros que no se pueden encontrar en estado natural en ninguna parte del mundo. Cada botella tiene una cantidad diferente de esas partículas y cada lote es único, lo que significa que podemos identificar categóricamente el lote de donde vino el líquido», aseguró.
«Nuestra base de datos es el vínculo forense que apunta a esa persona».