Cientos de manifestantes salieron este sábado a las calles de la capital de Irán, Teherán, para protestar contra el gobierno por haber mentido sobre su responsabilidad en la tragedia del avión de pasajeros ucraniano derribado el pasado miércoles.
Las protestas tuvieron lugar afuera de dos universidades, donde las fuerzas de seguridad del Estado detonaron bombas de gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes.
Ante esa situación, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tuiteó su apoyo para las protestas «inspiradoras».
Irán admitió este sábado que derribó «intencionalmente» el avión de Ukraine International Airlines, tres días después del incidente que mató a los 176 que viajaban en la aeronave Boeing 737-800.
Decenas de iraníes y canadienses, así como ciudadanos de Ucrania, Reino Unido, Afganistán y Alemania murieron en el avión.
El vuelo había partido de Teherán con destino a Kiev, la capital de Ucrania, cuando fue derribado cerca del aeropuerto Imam Khomeini.
La acción que se atribuyó el ejército de Irán ocurrió solo unas horas después del ataque iraní contra dos bases aéreas que albergan a las fuerzas estadounidenses en Irak.
La ofensiva fue en retaliación al asesinato del comandante iraní Qasem Soleimani, quien murió en un ataque de drones de Estados Unidos en Bagdad el 3 de enero.
¿Qué pasó en las protestas?
Los estudiantes se reunieron afuera de dos institutos, Sharif y Amir Kabir, según reportes de la prensa local, con la intención de expresar respeto por las víctimas. Pero con el pasar de las horas, la situación se tornó en una protesta.
La agencia de noticias semiestatal Fars publicó un reporte de los disturbios en el que afirma que hasta 1.000 personas habían coreado consignas contra los líderes, además de que rompieron fotos de Soleimani.
Los estudiantes pidieron el procesamiento de los responsables de la tragedia, además de quienes habían encubierto la acción, pues Irán en un principio rechazó estar detrás de la caída del avión.
Se escucharon cánticos como «que renuncie el comandante en jefe», en referencia al líder supremo Ali Jamenei, y «muerte a los mentirosos».
Fars dijo que la policía había «dispersado» a los manifestantes, que estaban bloqueando las calles. Imágenes de redes sociales parecían mostrar el accionar de gases lacrimógenos.
En internet también hubo expresiones de repudio contra el gobierno.
Sin embargo, las protestas fueron mucho más pequeñas que las masivas manifestaciones de duelo por la muerte del general Soleimani la semana pasada.
¿Cuál ha sido la reacción?
El presidente Trump tuiteó en inglés y, de forma inusual, también compartió mensajes en farsi.
«Para el pueblo iraní valiente y sufriente: he estado con ustedes desde el comienzo de mi presidencia y mi gobierno continuará apoyándolos. Estamos siguiendo de cerca sus protestas. Su valentía es inspiradora», dijo.
El secretario de Asuntos Exteriores de Reino Unido, Dominic Raab, emitió una declaración después de que el embajador británico Rob Macaire fue arrestado «sin motivo ni explicación» en una «violación flagrante del derecho internacional» en una de las protestas en Teherán.
Macaire fue retenido en la protesta llevada a cabo a las afueras de Amir Kabir, pero luego fue puesto en libertad.
Raab dijo que Irán podría «continuar su marcha hacia el estatus de paria… o tomar medidas para reducir las tensiones y emprender un camino diplomático hacia adelante».
¿Cómo reconoció Irán su falla?
Durante tres días, Irán negó los señalamientos de EE.UU. y Canadá de que sus misiles habían derribado el avión, con un portavoz acusando a las naciones occidentales de «mentir y participar en una guerra psicológica».
Pero este sábado por la mañana, una declaración del ejército en la televisión estatal reconoció que el avión había sido derribado por las fuerzas armadas estatales.
El general de brigada Amir Ali Hajizadeh, comandante aeroespacial de la Guardia Revolucionaria, explicó que un operador de misiles había actuado por su cuenta, confundiendo el avión con un «misil de crucero», ya que había informes de que tales armas habían sido disparados contra Irán.
«Tuvo 10 segundos para decidir. Podría haber decidido atacar o no atacar y bajo tales circunstancias tomó la decisión equivocada», dijo el general Hajizadeh.
«Él estaba obligado a comunicarse y obtener una comprobación. Pero aparentemente, su sistema de comunicaciones tuvo algunas interrupciones», continuó.
Hajizadeh aseguró que los militares actualizarán sus sistemas para evitar tales «errores» en el futuro.
Dijo que había «deseado haber muerto» después de que le informaron sobre el ataque con misiles, además de que informó lo ocurrido a sus superiores, por lo que cuestionó el que se hubiera negado lo ocurrido durante tanto tiempo.
El ayatolá Jamenei dijo que había «prueba de error humano», mientras que el presidente Hassan Rouhani lamentó «profundamente este desastroso error».
El ministro de Relaciones Exteriores, Javad Zarif, culpó en parte a Estados Unidos: «El error humano en un momento de crisis causado por el aventurerismo de los Estados Unidos condujo a este desastre».
¿Qué dijeron Canadá y Ucrania?
Tanto el presidente ucraniano Volodomyr Zelensky como el primer ministro canadiense Justin Trudeau hablaron con Rouhani este sábado.
Trudeau dijo que estaba «indignado y furioso» y pidió una investigación completa con «total claridad sobre cómo pudo haber ocurrido una tragedia tan horrible».
«Canadá no descansará hasta que haya rendición de cuentas, justicia y el cambio de página que las familias merecen… Están lastimadas, enojadas y afligidas y quieren respuestas», expresó.
Zelensky, que ha exigido una compensación y una disculpa, dijo que Rouhani le había asegurado que «todas las personas involucradas en este desastre aéreo serán llevadas ante la justicia».