Hunter Biden fue declarado culpable este martes de los tres cargos que enfrentaba por mentir sobre su consumo de drogas al comprar un arma.
Un jurado del estado estadounidense de Delaware declaró culpable al hijo del presidente Joe Biden tras una semana de testimonios de testigos y presentación de pruebas en el juicio penal.
Hunter Biden fue declarado culpable de los tres cargos que enfrentaba después de que el jurado deliberara durante unas tres horas.
El primer cargo era por hacer una declaración falsa para la adquisición de un arma de fuego, el segundo por hacer una declaración falsa para obtener el arma en los registros y el tercero es por posesión ilegal de un arma de fuego.
Todos ellos corresponden a delitos graves que conllevan sentencias con un máximo de 25 años de prisión en total, si bien expertos creen que la pena a la que se enfrentaría el hijo de Joe Biden podría ser mucho más reducida.
Aunque varios miembros de la familia de Hunter Biden habían acudido a los tribunales durante los últimos días, este martes solo estaban dos: su esposa Melissa Cohen Biden y James Biden, su tío y hermano del presidente.
Hunter Biden es el primer hijo de un presidente en ejercicio en afrontar un juicio penal.
La compra de un revólver
Todos los cargos que enfrentaba estaban relacionados con la compra de un revólver en una tienda de armas de Delaware en octubre de 2018, arma que conservó durante unos 11 días.
Según admitió el propio acusado, en aquel momento estaba sumido en la agonía de una «adicción total» al crack.
Los dos cargos por declaraciones falsas correspondían a acusaciones de haber mentido sobre su consumo de drogas en un formulario exigido por el gobierno federal cuando compró el arma.
Específicamente, los fiscales alegaban que declaró falsamente que «no era un usuario ilegal ni adicto a ningún narcótico estimulante» cuando compró un revólver Colt Cobra Special.
El tercer cargo estaba relacionado con la posesión de un arma de fuego mientras presuntamente consumía drogas.
El arma fue desechada y descubierta en un contenedor cerca de una tienda de comestibles en Greenville (Delaware), lo que provocó una investigación que finalmente condujo a los investigadores al formulario y a Hunter Biden.