«Una adolescente que trabaja en su problema de manejo de la ira. Ahora se relaja y mira una buena película antigua con un amigo».
La activista ambiental sueca Greta Thunberg modificó este jueves en su perfil de Twitter con esta descripción en la que adopta, en tono de burla, lo que había dicho de ella el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
«Tan ridículo. ¡Greta debe trabajar en su problema de manejo de la ira y luego ir a una ver una buena película antigua con un amigo! ¡Relájate, Greta, relájate!», escribió Trump en su cuenta de Twitter.
El presidente estadounidense salió a criticar a la joven luego de que Thunberg, de 16 años de edad, fuera nombrada como la «Persona del Año» de la revista Time el miércoles por liderar un movimiento global contra el cambio climático.
Greta vs. líderes
Esta no es la primera vez que Greta Thunberg cambia su biografía en Twitter para reflejar las críticas que recibe de Trump y otros líderes.
El martes pasado, Thunberg cambió su descripción y agregó a pirralha, una palabra portuguesa que significa «mocosa», después de que el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, la criticara por haber puesto en relieve la difícil situación de los pueblos indígenas de Brasil.
«Greta ha estado diciendo que los indígenas murieron porque estaban defendiendo el Amazonas», dijo Bolsonaro a los periodistas.
«Es sorprendente cuánto espacio le da la prensa a este tipo de pirralha», añadió.
En octubre, Greta Thunberg cambió la descripción que hace de sí misma en el apartado «biografía» de Twitter a «una adolescente amable pero mal informada».
Así fue exactamente como la describió el presidente ruso Vladimir Putin en una conferencia en Moscú.
En septiembre, el presidente Trump publicó un video de ella hablando con emoción en la conferencia de la ONU y comentó sarcásticamente: «Parece una niña muy feliz a la que le espera un futuro brillante y maravilloso».
Ella cambió su biografía en consecuencia: «Una joven muy feliz esperando un futuro brillante y maravilloso».
Durante el último año, Thunberg inspiró un movimiento global para luchar contra el cambio climático que la llevó a convertirse en la más joven «persona del año» jamás elegida por la revista Time desde que empezó la tradición en 1927.
En agosto del año pasado, la joven sueca empezó a faltar los viernes a la escuela para protestar por la ausencia de acciones para combatir el cambio climático y pronto millones de jóvenes y adolescentes de todo el mundo empezaron a organizar sus propias huelgas escolares.
Pero impulsar ese movimiento también le valió a Greta cosechar críticas de muchos sectores, aunque ella se las arregla para responder en las redes sociales.