Se estima que en el próximo año la vida de unos 325.000 migrantes en situación irregular en Ecuador cambiará sustancialmente.
El país andino inició el 1 de septiembre un proceso masivo de regularización a migrantes extranjeros indocumentados, que carecen de visas o un derecho legal para permanecer en el país.
Esta amnistía migratoria, que durará al menos un año, abre la puerta a la esperanza a miles de familias para normalizar su situación.
Tras un registro migratorio, quienes consigan una visa y quieran quedarse permanentemente en Ecuador podrían optar finalmente a una cédula.
Ese documento, dijeron fuentes del gobierno, dará acceso a algunos servicios básicos que no se pueden tramitar con un pasaporte.
Inscribir a los niños en el colegio o abrir una cuenta bancaria facilitará la vida de muchos y «permite su inclusión social y económica» en Ecuador.
El grueso de los beneficiados será sobre todo gran parte de los 500.000 migrantes y refugiados venezolanos que vivían en Ecuador en agosto de 2022, según datos del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).
Más del 62% de esa cifra oficial se encuentran en situación irregular.
En los últimos años, Ecuador se ha convertido en un país de tránsito hacia otros países de Sudamérica -como Perú, Chile o incluso Argentina- de los venezolanos que abandonaron el país huyendo de la grave crisis económica.
Pero muchos otros han decido empezar una nueva vida en la nación andina.
«El objetivo de esta amnistía es conocer qué extranjeros tenemos aquí en el territorio, qué actividades vienen desarrollando para poder hacer una política pública sobre movilidad humana», le explicó a BBC Mundo el subsecretario de Migración, Richard Karolys.
Procedimiento excepcional
«En América del Sur, [Ecuador] es el país con las visas más caras, más caro que Chile, más caro que Brasil, inclusive más caro que la propia Venezuela. Pero en este procedimiento extraordinario, el trámite vale US$50», explicó desde Ecuador el periodista venezolano Jefferson Díaz, especialista en temas de migración.
Mientras el registro es gratuito, la visa costará US$50 y durará dos años prorrogables.
El proceso, que involucra a varios ministerios y a la Cancillería, se dividirá en 3 fases.
La primera está dirigida a los ciudadanos venezolanos y su grupo familiar, que ingresaron en el país por un punto oficial.
Desde principios de mes pueden solicitar lo que se conoce como un Registro de Permanencia.
«Esta fase es para los venezolanos que tienen libreta [pasaporte] aunque esté vencida«, dice Díaz.
Detrás de ellos, en una segunda fase podrán iniciar el mismo trámite el resto de ciudadanos extranjeros que ingresaron por un punto oficial.
Aquí el procedimiento se abre a peruanos, colombianos, haitianos, cubanos.. etc.
Y a partir de febrero del próximo año, el trámite se abre también para los venezolanos que ingresaron al país irregularmente o que no tienen libreta.
Las cifras no oficiales avisan de que en esta última fase se podrían regularizar hasta otros 300.000 venezolanos.
Entre los organismos que participan y coordinan el operativo también está el Ministerio de Inclusión Económica y Social con un mandato específico para regularización de niños, niñas y adolescentes no acompañados independientemente de la nacionalidad y forma de ingreso.
El gobierno dijo el miércoles que no regularizará a las personas que tengan antecedentes penales.
«Lo que está claro es que no van a regularizar a las personas que representen una amenaza a la seguridad del Estado. Y eso es un concepto muy ambiguo», explica Díaz.
«Solo en las primeras horas, ya se habían registrado en la plataforma 25.500 extranjeros, de los cuales ya tienen agendada su cita 24.340 extranjeros», dijo el subsecretario de Migración.
Segunda amnistía
Esta es la segunda vez que Ecuador inicia un proceso de estas características.
La primera fue en 2019. En ese entonces se entregaron visas temporales por razones humanitarias a unos 57.500 venezolanos, según datos de Cancillería.