Los resultados preliminares de las elecciones extraordinarias llevadas a cabo este domingo en Perú apuntan a un Parlamento fragmentado, en el que el partido de centro-derecha Acción Popular es la primera fuerza y el fujimorista Fuerza Popular, que había sido la mayoría opositora, la sexta.
De acuerdo al conteo rápido, llevado a cabo por la consultora Ipsos, Acción Popular obtuvo el 10,1% de los votos válidos, la segunda formación más votada fue el ultraconservador Frente Popular Agrícola del Perú (Frepap), con el 8,8%, y la tercera Podemos Perú, con el 8,2%.
Frepap es un partido ultraconservador y mesiánico, con base rural, que vuelve al parlamento tras 20 años de ausencia.
Sin embargo, debido a la fórmula de repartición de diputaciones, no será el segundo partido con más escaños en el Parlamento.
Ese puesto le corresponderá, de acuerdo a los resultados preliminares, a Alianza por el Progreso, del empresario César Acuña.
Fue aliado del fujimorista Fuerza Popular en el Congreso disuelto en septiembre, con la excepción de un par de congresistas que se abstuvieron de sumarse.
Horas bajas para el fujimorismo
Varios expertos consultados por BBC Mundo adelantaron un panorama poco favorable para Fuerza Popular en estas elecciones.
«El fujimorismo está pasando por uno de los peores momentos de su historia«, explicaba Carlos Meléndez, politólogo peruano y profesor de la Universidad Diego Portales de Chile, en una conversación previa a conocerse los resultados.
«Había sido la última fuerza política que había despertado ilusión en el Perú, en 2016. Ilusión en el sentido que el 39% votó en primera vuelta por Keiko Fujimori. Hasta cierto punto había sido la última esperanza», explicaba.
«Nadie había despertado tanto empuje, tantas ganas, tanta emoción como el fujimorismo. Pero del 2016 en adelante, el fujimorismo está en las páginas policiales y judiciales por todos los casos de corrupción en los que presumiblemente están envueltos».
Alfredo Torres, el presidente de la consultora Ipsos Perú, también mencionaba eso último como motivo del desplome de Fuerza Popular, sumado a las divisiones internas.
«El fujimorismo tuvo una actitud muy obstruccionista en el gobierno de PPK, fue muy crítico, censuró a sus ministros y eso generó un malestar en la ciudadanía, que más bien hubiese esperado una cooperación con el ejecutivo», le dijo el experto a BBC Mundo.
«A eso se le puede sumar que internamente también tuvieron divisiones. Kenji Fujimori [hermano de Keiko] hizo esfuerzos para que el padre fuera indultado y pactó con PPK. Mientras que lo que hizo Keiko fue armar una trampa para sacar a PPK y a su hermano Kenji del Congreso. Entonces hay un sector del fujimorismo al que perdieron ahí, que se quedó resentido por esa actitud infraterna», prosiguió.
«Otras personas también se están alejando por el caso Odebrecht, por el que Keiko está siendo investigada. Aunque el núcleo duro del fujimorismo sostiene que es inocente.
Elecciones extraordinarias
Estos comicios extraordinarios ocurren solo tres años y nueve meses después de haber elegido al Parlamento anterior (en abril de 2016), y apenas un año y tres meses antes de elegir al próximo, en abril de 2021.
La anomalía de plazos se debe a que el pasado septiembre Vizcarra disolvió el Congreso formado en 2016, así que los comicios de este domingo eran solo para elegir los reemplazos de los legisladores.
La disolución del legislativo fue el punto final de un trance que empezó en agosto de 2016, cuando la mayoría fujimorista y sus aliados declararon la guerra al Ejecutivo.
Vizcarra continúa, pues, en el cargo de presidente.