Los Estados Unidos de Kailasa participaron en sesiones de dos debates en la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
De entrada la información no parece nada nuevo, pues es lo que se espera que hagan los países miembros del organismo internacional. El problema es que Kailasa ni es parte de la ONU y siquiera es un Estado de verdad.
El hecho ha provocado revuelo y ha forzado a la ONU a asegurar que ignorará las declaraciones hechas por los representantes del país ficticio ante dos de sus instancias en Ginebra (Suiza).
Un funcionario aseguró que la participación de los representantes de Kailasa fueron «irrelevantes» y «tangenciales» frente a los temas que se estaban discutiendo.
Tras el país y su fundador
El autoproclamado gurú hindú Nithyananda Paramashivam afirma haber fundado a los Estados Unidos de Kailasa en 2019.
¿Dónde? Supuestamente en una isla que habría comprado a Ecuador, según dijo en 2019 el propio Paramashivam. Ese año, desde Ecuador se negó que el gurú estuviera en su territorio o que le hubieran dado asilo.
Según el sitio web de Kailasa, el supuesto Estado, que recibe el nombre de una montaña del Himalaya que se considera la morada del dios hindú Shiva, dice contar con «dos mil millones de hindúes practicantes» entre su población.
Asimismo, afirma tener una bandera, una constitución, un banco central, un pasaporte y un emblema.
En enero pasado el imaginario país también aseguró haber firmado un acuerdo con las autoridades de la ciudad estadounidense de Denver, hecho que presenta como un reconocimiento de su existencia.
Pero si lo anterior no fuera suficiente el supuesto padre fundador del «primer estado soberano de los hindúes» es buscado por la justicia de la India para hacer frente a acusaciones de violación y agresión sexual.
Una discípula del supuesto líder religioso lo acusó de violación en 2010, luego de lo cual fue arrestado brevemente por la policía antes de obtener la libertad bajo fianza. En 2018 fue acusado en un tribunal.
Días antes de abandonar India se conoció de otra denuncia por secuestrar y confinar a niños en su ashram (monasterio), ubicado en el estado de Gujarat, al occidente el país asiático.
Nithyananda, cuyo paradero se desconoce, ha rechazado los señalamientos en su contra.
Explicando el incidente
La aparición del inexistente país en dos sesiones de comité de la ONU a finales de febrero no pasó desapercibida en India, donde fue reseñada por los medios y se hizo viral en las redes sociales. El gobierno de Nueva Delhi no han hecho ningún comentario sobre el incidente.
Un funcionario de la ONU le admitió a la BBC, a través de un correo electrónico, que «los representantes del Kailasa asistieron a dos sesiones públicas en Ginebra», reportó Meryl Sebastian.
El primer evento al que lograron colarse los funcionarios del inexistente Estado fue un debate sobre la representación de las mujeres en los sistemas de toma de decisiones, organizado por el Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer (CEDAW) el 22 de febrero.
Dos días después, los supuestos diplomáticos también se hicieron un espacio una discusión sobre desarrollo sostenible, organizada por el Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (CESCR).
Vivian Kwok, oficial de medios de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, atribuyó el incidente a que este tipo de diálogos son reuniones públicas y abiertas a cualquier persona interesada.
La ONU la integran 193 estados miembros, aunque también permite la participación de algunos pueblos que no tienen un Estado propio, pero bajo la aprobación de la mayoría de sus miembros, como es el caso de territorios palestinos.
Sin embargo, el hecho representa un bochornoso incidente que ha puesto en tela de juicio la rigurosidad de los protocolos de las Naciones Unidas.
«No cualquiera puede entrar para presenciar una conferencia, a una sesión o a una discusión de un organismo de la ONU y mucho menos para participar en ella. Se necesita registrarse previamente», afirmó a BBC Mundo, Mercedes De Freitas, directora de la organización Transparencia Venezuela y quien tiene más de una década acudiendo ante las distintas instancias del sistema de Naciones Unidas para exponer temas sobre el país latinoamericano.
«El proceso de registro no es fácil. Para las organizaciones de la sociedad civil, por ejemplo, se exige que una organización ya registrada en la ONU te apoye», explicó.
Aprovechando la tribuna
Un video en el sitio web de la ONU de la segunda sesión muestra que cuando se invita a los asistentes a hacer preguntas y una mujer que se presenta como Vijayapriya Nithyananda, «la embajadora permanente de los Estados Unidos de Kailasa» y dice que preguntar sobre «los derechos indígenas y el desarrollo sostenible».
La interviniente describió a Kailasa como el «primer estado soberano para los hindúes» establecido por Nithyananda, el «supremo pontífice del hinduismo». También afirmó que el país ha tenido «éxito con el desarrollo sostenible», porque proporcionó necesidades como alimentos, vivienda y atención médica de forma gratuita a todos sus ciudadanos.
La supuesta embajadora aprovechó su turno para pedir medidas para «detener la persecución» contra Nithyananda y la gente de Kailasa, reseñó Meryl Sebastian.
Sin rastro
Nithyananda tiene tres años sin aparecer en público, aunque los videos de sus sermones se publican regularmente en sus canales de redes sociales.
El diario londinense The Guardian informó el año pasado que el representante de Nithyananda en Reino Unido asistió a «una glamorosa fiesta de Diwali en la Cámara de los Lores» por invitación de dos miembros del gobernante Partido Conservador.
El solicitado gurú publicó en Twitter la foto de su supuesta embajadora participando en el evento de la ONU y luego presentó, a través de la misma red social, a los representantes diplomáticos de su supuesto Estado en diferentes partes del mundo, incluido Reino Unido, Canadá y el Caribe.