La foto de tres niñas judías que huían de la Alemania nazi se convirtió en una imagen icónica que aparecía en museos, exposiciones y publicaciones.
Fue tomada en la estación de Liverpool Street de Londres, pero durante más de 80 años las identidades de las niñas fueron un misterio.
Hasta ahora.
Inge no recuerda haberse tomado la foto y durante décadas ni siquiera supo de su existencia.
Cuando era una niña, a la edad de cinco años, huyó de su casa en Breslau, Alemania, ahora Wroclaw en Polonia, con su hermana Ruth, de 10 años.
Su madre y su hermana menor se quedaron atrás y fueron asesinadas en Auschwitz.
No fue hasta que se convirtió en jubilada que Inge se dio cuenta de que ella y Ruth, quien murió en 2015, habían sido inmortalizadas para siempre como íconos del Holocausto y del «Kindertransport», es decir, la evacuación masiva de niños judíos de la Alemania nazi en 1939.
Encontró la imagen en Never Again, un libro del historiador Martin Gilbert.
«Fue una gran sorpresa», dijo Inge, cuyo apellido de soltera era Adamecz.
«Simplemente puso en el libro ‘Tres niñas pequeñas’, así que le escribí y le dije que estabámos vivas. La gente dice que me parezco a Shirley Temple. ¿Por qué estoy sonriendo?».
«Ruth estaba muy afectada».
«No sé quién es esa tercera chica con la muñeca. Nunca la reconocí», añade.
La niña con la muñeca era en realidad Hanna Cohn, de 10 años, que llegó en el mismo tren que las niñas con su hermano gemelo Hans, más tarde llamado Gerald.
Ambos eran de Halle, Alemania.
La pierna de Hans se puede distinguir en la placa de vidrio original de la imagen.
Al igual que Inge y Ruth, Hanna no recordaba la foto que se tomó, aunque sí recordaba el viaje y la muñeca.
Murió en 2018 pero habló de sus experiencias en una entrevista con la Universidad de Londres.
«Recuerdo pasar por Holanda y recuerdo amables señoras que nos daban bollos pegajosos y limonada», dijo.
Un viaje en tren
«Llegamos a la estación de Liverpool Street en un tren desde Harwich. Recuerdo que los asientos estaban tapizados, no eran asientos de madera y estaba muy preocupada de que estuviéramos en primera clase por error. Soy muy conformista».
«También me preocupaba que nuestro destino era Liverpool Street porque pensaba que íbamos a Londres y que Liverpool estaba en otro lugar».
«Sin embargo, llegamos a este gran gran salón. Estaba sosteniendo una muñeca a la que llamé Evelyn».
Hanna se dio cuenta por primera vez de la fotografía cuando su hermano la vio en una exposición en la Biblioteca de Camden, en Londres, para conmemorar el 50 aniversario del Kindertransport.
Sus hijas gemelas Debbie y Helen Singer dijeron que siempre tuvo mucha curiosidad por las otras dos niñas.
«Cuando vimos la foto en la que ella estaba sentada con su trenza y su muñeca, decía: ‘Quiénes serán las otras dos niñas'», dijo Debbie.
Luego, más de 80 años después de que se tomara la foto, sus hijas descubrieron la verdad tras escuchar un podcast de la BBC.
La historia, The Girls: A Holocaust Safe House, contó la historia olvidada de un albergue del noreste donde Inge, cuyo nombre de casada es Hamilton, y Ruth habían pasado parte de la guerra.
«Era el Día de la Memoria del Holocausto y un amigo mío me envió un enlace a la noticia en la web de la BBC», dijo Helen, y agregó: «Pensé: ‘¿Por qué me envía este enlace?’ pero después vi la foto de mi madre y los nombres de las otras dos niñas, Ruth e Inge».
‘Hemos encontrado a las chicas’
«Estábamos muy emocionados. Le envié un mensaje de texto a Debbie y le dije: ‘Hemos encontrado a las chicas'».
Luego, en abril, Inge conoció finalmente a las hijas de Hanna en el Museo Imperial de la Guerra en Londres, donde la fotografía se ha exhibido durante más de 20 años.
Pudieron hablar más sobre sus familias y lo que sucedió después de que se tomara la foto.
«Inge es una persona especial en nuestras vidas», dijo Debbie.
«Creo que mamá estaría muy orgullosa de nosotras».
«Ella siempre hablaba de esas dos niñas y el hecho de que las hayamos encontrado sería muy importante para ella».
Pero ¿y el fotógrafo?
Sabemos por los registros en poder de Getty Images Hulton Archives que su nombre era Stephenson y trabajaba para Topical Press Agency, que empleaba a más de 1.000 fotógrafos que proporcionaban imágenes para una enorme industria periodística.
El diario donde se publicaron los trabajos del fotógrafo es del 5 de julio de 1939 y está claramente marcado como «Tres niñas pequeñas esperando en la estación de Liverpool Street», con el nombre del fotógrafo Stephenson en el margen.
No podemos estar seguros, pero es posible que fuera un escocés llamado John F. Stevenson (en los registros se usaron ambas formas de ortografía) que se hizo famosos por coescribir la canción Dear Old Glasgow Toon.
En la década de 1930, le dio a The Topical Press Agency una dirección en Glasgow.
Con la ayuda de la oficina de registros públicos de Escocia, a través de las direcciones en los certificados de nacimiento y defunción, localizamos a su familia.
Su nieto, el periodista Gordon Stevenson, quedó fascinado con la historia de la carrera de su abuelo como fotógrafo de prensa independiente a finales de los años 30.
«Sabíamos que había tomado fotografías toda su vida y tenemos muchas de sus fotos», dijo Gordon.
«Sabíamos que fue una gran parte de su vida».
«Pero eso siempre fue en sus últimos años, por lo que esta revelación de una carrera bastante ecléctica a finales de los años 30 fue una sopresa».
«No sabíamos nada de su carrera fotográfica en el sur».
«Entonces, descubrir este historia de la que no sabíamos nada fue una verdadera revelación y todavía intentamos comprender cómo es posible que fuera él, pero es absolutamente maravilloso».
La fotografía apareció en el periódico nacional «The News Chronicle» al día siguiente de ser tomada.
Pero luego se usó solo ocasionalmente hasta la era digital, cuando empezó a aparecer con más frecuencia en periódicos y exposiciones.
Y durante una visita de Debbie y Helen Singer, Getty Archives actualizó sus registros, por lo que el pie de foto muestra ya los nombres de las tres niñas.
Las tres niñas con sus nombres
«Me siento bastante conmovida, porque el nombre de nuestra madre y de dónde vino ahora están adjuntos a esta fotografía junto con Inge y Ruth y no son solo niños sin nombre», dijo Debbie.
Helen estuvo de acuerdo y agregó: «Estas no eran solo ‘tres niñas pequeñas’, eran personas que tenían nombres y vidas que importaban».
«Merecían tener su nombre y creemos que nuestra madre habría estado feliz por esto».
Inge, que ahora tiene 89 años y vive en el sur de Londres, esperó más de 80 años para conocer el nombre de la niña que compartió su muñeca con ella.
Ahora sabe mucho más sobre la fotografía que la ha seguido.
«Esta fotografía ha recorrido un largo camino», dijo, y agregó: «Simplemente parece atraer a la gente».