Lightning podría tener sus días contados en Europa. Es el característico cable conector para cargar y sincronizar muchos dispositivos de Apple.
Los miembros del Parlamento Europeo (el órgano legislativo de la Unión Europea) instaron a la Comisión Europea (el Ejecutivo) este lunes a obligar a los gigantes tecnológicos a que adopten un método de carga universal único.
Los dispositivos Android, por ejemplo, usan otros dos cables de carga, el USB-C y el micro-USB.
Lo que el Legislativo quiere es que todos los fabricantes usen el mismo y que los usuarios no tengan que tener diferentes variedades para cada aparato.
Los reguladores europeos votarán sobre el asunto en una fecha aún no determinada, pero Apple dice que la normativa propuesta reprimiría la innovación y resultaría perjudicial para los consumidores.
¿Cuán probable es que pase?
Si el regulador aplica la propuesta, los dispositivos Apple que se vendan en Europa tendrían que tener un nuevo método de carga.
Es probable que Apple adopte el USB-C, teniendo en cuenta que para el iPad Pro 2019 optó por esta tecnología y dejó de lado el lightning. Este también es el tipo de puerto que viene en la mayoría de teléfonos Android recién fabricados.
Otra alternativa sería eliminar por completo los puertos y cables y utilizar en su lugar la carga inalámbrica.
¿Por qué el cambio?
La Comisión Europea ha estado haciendo campaña durante la última década para que haya un único método de carga.
En 2009, había más de 30 tipos de cargadores en el mercado. Ahora, ese número se ha reducido a solo 3 tipos.
El regulador europeo está decidido a reducir la basura electrónica que generan los cables obsoletos, que según sus cálculos generan más de 51.000 toneladas de desperdicios cada año.
«Esto es muy perjudicial para el medioambiente», dijo el parlamentario europeo Álex Agius Saliba.
«Un cargador común se adaptaría a todos los celulares, tabletas, lectores de libros electrónicos y otros dispositivos portátiles».
¿Ha pasado esto antes?
Apple, junto con otros 10 grandes líderes tecnológicos como Nokia y Samsung, firmó un memorando de entendimiento en 2009.
En la circular se comprometía a proporcionar a los consumidores cargadores compatibles con puertos micro-USB.
Sin embargo, Apple aprovechó un vacío legal que le permitió continuar usando su propio cable cargador si ofrecía también un adaptador a micro-USB.
En 2014, la Unión Europea aprobó la «Directiva de equipos de radio», que pedía un «esfuerzo renovado para desarrollar un cargador común».
Apple insistió en que sus dispositivos más delgados no podrían adaptarse a la nueva tecnología USB-C. La empresa advirtió que cumplir con el estándar deseado les costaría hasta 2.000 millones de dólares.
¿Y la carga inalámbrica?
Apple y muchos de sus rivales, como Huawei y Samsung, ya lanzaron productos que cargan sus dispositivos de manera inalámbrica.
Aunque la tecnología todavía está en pañales, nuevos desarrollos han hecho que ahora pueda competir con los métodos de carga tradicionales.
Algunos analistas, incluso predicen que Apple podría eliminar por completo sus puertos de carga y, en el futuro, lanzar al mercado modelos de iPhone y iPad que se basen únicamente en la carga inalámbrica.