La tensión entre Venezuela y Guyana por la disputa que ambos países mantienen sobre el Esequibo ha escalado rápidamente esta semana.
Guyana considera “una amenaza inminente” el plan de acción trazado por el presidente Nicolás Maduro, que declaró la creación de un estado venezolano en esta región administrada por Guyana y que conforma dos terceras partes de su territorio.
Maduro también instó a la empresa estatal petrolera PDVSA a «otorgar licencias operativas para la explotación de hidrocarburos en el Esequibo y a su Ejército crear una «zona de defensa integral» para el nuevo estado que reclama.
El presidente guyanés, Irfaan Ali, anunció que su gobierno tomará todas las medidas necesarias para “defender lo que es nuestro” y convocó a sus aliados regionales y al Comando Sur de Estados Unidos.
Este, por su parte, convocó maniobras militares junto con la Fuerza de Defensa de Guyana, en una aparente advertencia que Caracas calificó como una “provocación”.
- «La única forma que tiene Venezuela para ejercer la soberanía sobre el Esequibo sería una acción militar y no está en capacidad de hacerla»
- Por qué se agudizó la disputa por el Esequibo, la zona que enfrenta a Guyana y Venezuela desde hace casi dos siglos
- “Una amenaza directa para Guyana”: la dura respuesta del presidente Irfaan Ali a las medidas anunciadas por Venezuela sobre el Esequibo
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Final de Recomendamos
Repasamos las claves para entender la situación actual.
1. Qué es el Esequibo y cuál es su importancia
También conocido como la Guayana Esequiba, es un territorio de 159.500 kilómetros cuadrados al oeste del río Esequibo.
Para que te hagas una idea de su tamaño, es 1,5 veces más grande que la isla de Cuba y 3 veces más que Costa Rica.
El Esequibo concentra seis de las diez regiones que constituyen la República Cooperativa de Guyana y alberga a unos 125.000 de los 800.000 habitantes del país.
Se encuentra en pleno corazón del Escudo Guayanés, una región geográfica al noreste de América del Sur que, además de ser una de las formaciones más antiguas de la Tierra, posee abundantes recursos naturales y minerales.
Expertos la comparan con su vecino Arco Minero del Orinoco, un área de explotación de más de 111.800 kilómetros cuadrados en Venezuela con grandes reservas de minerales como oro, cobre, diamante, hierro, bauxita o aluminio.
El Esequibo alberga la mina de oro Omai, una de las más grandes del Escudo Guayanés y una de las mayores fuentes de ingresos de Guyana, que entre 1993 y 2005 produjo más de 3,7 millones de onzas del preciado metal.
Y en las aguas territoriales de la región en disputa hay una inmensa riqueza petrolera.
Desde 2015 hasta la fecha, la multinacional ExxonMobil y sus socios han realizado 46 descubrimientos que han disparado las reservas de petróleo de Guyana a unos 11.000 millones de barriles, aproximadamente el 0,6% del total mundial.
El Esequibo también cuenta con importantes recursos hídricos gracias a su extensa red de ríos.
2. Por qué se ha agudizado el conflicto
Para responder a esa pregunta, primero vamos a repasar brevemente la historia del Esequibo.
Cuando España fundó la Capitanía General de Venezuela, el Esequibo formaba parte de la subentidad territorial y, tras obtener su independencia en 1811, Venezuela asumió su soberanía.
Por su parte, Reino Unido firmó un pacto con Países Bajos para adquirir alrededor de 51.700 kilómetros cuadrados al oriente de Venezuela, sin definir la frontera occidental de lo que pasaría a ser la Guayana Británica.
Londres designó en 1840 al explorador Robert Schomburgk, que trazó una línea que reclamaba unos 80.000 kilómetros cuadrados adicionales y que fue ampliada cuatro décadas después.
En 1895 Estados Unidos recomendó que la disputa se resolviera en un arbitraje internacional y cuatro años después se emite el Laudo Arbitral de París, que dejó el territorio bajo dominio británico.
Tras salir a la luz cuatro décadas después documentos que cuestionaban la imparcialidad del fallo, Venezuela lo consideró nulo y reactivó su reclamo.
En 1966 Reino Unido otorgó la independencia a Guyana y las partes se comprometieron a buscar soluciones, pero nunca hubo un dictamen de la ONU y el caso se archivó durante el gobierno de Hugo Chávez por las buenas relaciones entre el fallecido presidente venezolano y Georgetown.
Sin embargo, la situación cambió cuando en 2015 comenzaron a descubrirse decenas de yacimientos de petróleo en áreas costeras de la zona en disputa, que aportaron a Guyana una nueva e inesperada fuente de riqueza.
Los hallazgos han convertido al país de 800.000 habitantes en una de las economías de mayor expansión en el mundo, con un crecimiento del PIB del 57,8% en 2022 y del 25% pronosticado para este año.
Desde que se descubrieron y comenzaron a explotar los nuevos yacimientos, las tensiones entre Caracas y Georgetown han aumentado progresivamente.
Pero los intereses del gobierno de Maduro no son sólo económicos sino también políticos, según expertos.
Recientemente el oficialismo convocó varias manifestaciones “de unión nacional” para «defender» el Esequibo e instó a figuras del mundo del entretenimiento a involucrarse en la disputa.
Como parte de su llamado “de unión nacional”, el gobierno convocó un referendo el pasado domingo al que precedió una intensa campaña para que la gente votara a favor de la soberanía venezolana sobre el Esequibo.
Críticos aseguran que, con estas acciones, Maduro trata de erigirse como el defensor de la causa común venezolana de cara a las elecciones presidenciales que se convocarán en 2024 y poco después de las primarias de la oposición, en las que se eligió a María Corina Machado como su rival.
3. Qué ha pasado desde el referendo
El resultado del referendo fue la aprobación con más del 95% de votos a favor de las propuestas del gobierno de Nicolás Maduro, entre ellas la creación del estado Guayana Esequiba como parte del territorio venezolano y un plan para otorgarles la ciudadanía venezolana a sus habitantes.
El gobierno aseguró que más de 10,5 millones de personas acudieron a las urnas, aunque la cifra fue puesta en duda tras divulgarse imágenes de centros de votación más bien vacíos durante la jornada.
Previamente a la votación, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) envió a Caracas la orden de “abstenerse de cualquier acción que altere la situación que prevalece en el territorio en disputa”.
La celebración del referendo venezolano el domingo 3 de diciembre causó preocupación en Guyana, cuyo gobierno aseguró mantenerse “vigilante” ante cualquier contingencia.
El martes 5, dos días después del referendo, Maduro dio un paso más al proponer una ley para declarar la creación de un estado venezolano en el Esequibo.
El presidente instó a la empresa estatal petrolera PDVSA a «crear la división PDVSA-Esequibo» y a otorgar «de inmediato» licencias operativas para la explotación de crudo, gas y minas en la región.
Ordenó, asimismo, crear una «zona de defensa integral de la Guayana Esequiba» ubicada en la localidad de Tumeremo, en el estado Bolívar (sur) y fronteriza con la zona en disputa, bajo el mando del general Alexis Rodríguez Cabello, primo del poderoso “número dos” del chavismo Diosdado Cabello.
Esto hizo saltar las alarmas en Georgetown.
«Estamos ante una amenaza inminente, Venezuela se ha declarado un país fuera de la ley. Nos estamos preparando para defender lo que es nuestro», declaró su presidente.
Irfaan Ali advirtió de que cuenta con el apoyo militar de Estados Unidos y el respaldo de los 15 países de la Comunidad del Caribe (Caricom), Gran Bretaña y la Commonwealth.
El Comando Sur del ejército de Estados Unidos anunció este jueves maniobras militares conjuntas con la Fuerza de Defensa de Guyana.
Los ejercicios buscan reforzar tanto la cooperación entre ambos ejércitos como en el ámbito regional, según el comunicado del Comando Sur.
Este aseguró que se trata de maniobras de carácter rutinario en el marco de la colaboración habitual de las fuerzas armadas de ambos países, pero expertos las interpretan como una respuesta al anuncio de Maduro.
De hecho, autoridades venezolanas han criticado las maniobras, entre ellos el ministro de Defensa, Vladimir Padrino, que las tildó de “infeliz provocación”.
En este ambiente de tensión, el gobierno de Guyana anunció el jueves que cinco cinco oficiales militares murieron después de que el helicóptero en el que viajaban se estrellara cerca de la frontera con Venezuela.
Las autoridades guyanesas están investigando las causas del accidente, pero insistieron en no tener indicaciones que sugieran alguna hostilidad.
Las reacciones internacionales
El Comando Sur también declaró en un comunicado que EE.UU. “continuará su compromiso como socio fiable para la seguridad de Guyana y con la promoción de la cooperación y coordinación regionales”.
Previamente a las maniobras, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, se dirigió el miércoles al presidente Ali para «reafirmar el apoyo inquebrantable de Estados Unidos a la soberanía de Guyana«, según un comunicado del Departamento de Estado.
Blinken pidió «una solución pacífica» y que las dos partes respeten el laudo arbitral de 1899, al menos hasta que «lleguen a un nuevo acuerdo o un órgano legal competente decida lo contrario».
Tanto el secretario de Estado como el presidente guyanés abogaron por respetar la orden de la Corte Internacional de Justicia del 1 de diciembre que exigía a Venezuela y Guyana abstenerse de cualquier acción que pudiera agravar el conflicto.
Brasil, el país que comparte frontera en su región norteña con Venezuela y Guyana, incluida la zona del Esequibo, envió un mensaje de distensión.
“No queremos guerras aquí en América del Sur. No necesitamos guerras, no necesitamos conflictos. Lo que necesitamos es construir la paz”, afirmó el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, durante la cumbre semestral del Mercosur en Río de Janeiro.
Los presidentes de las naciones del Mercosur (Argentina, Bolivia, Brasil, Uruguay y Paraguay), expresaron «su profunda preocupación con el aumento de las tensiones» entre Venezuela y Guyana en una declaración propuesta por Brasil al término de la cumbre, y a la que también se adhirieron Chile, Colombia, Ecuador y Perú.
En ella, los países sudamericanos alertaron sobre “acciones unilaterales que deben ser evitadas, pues añaden tensión», e instaron a ambas partes “al diálogo y a la búsqueda de una solución pacífica de la controversia a fin de evitar iniciativas unilaterales que puedan agravarla».
Fuentes de la Cancillería brasileña, por su parte, indicaron a la agencia EFE que todos los países de la región están «agotando todas las vías diplomáticas» para «intentar apaciguar la situación» entre los dos países.
El presidente saliente de Argentina, Alberto Fernández -que el domingo entregará el poder a Javier Milei- declaró que la situación «no está bien» y que hay que evitar que “se pierda” el statu quo de América Latina como región de paz.
Mientras, la Caricom convocó para este viernes una sesión de urgencia en relación a la disputa del Esequibo.
El organismo de los países caribeños ya ratificó los pasados días la sentencia de la CIJ que exige abstenerse de acciones que puedan agravar la crisis.
El Consejo de Seguridad de la ONU, por su parte, anunció que tratará el viernes la situación actual de la disputa del Esequibo en una reunión a puerta cerrada.