La Asamblea Nacional (AN) pospuso este martes un debate sobre la postura de la Unión Europea (UE) frente a la crisis del país para esperar por un nuevo pronunciamiento del bloque comunitario.
El debate fue pospuesto luego de que el presidente del Parlamento, Omar Barboza, explicara que durante la mañana de este martes se comunicó con la embajadora de la UE en Venezuela, Isabel Brilhante, quien le informó que diferentes fracciones parlamentarias del bloque están trabajando en un acuerdo sobre el país.
Brilhante me informó que hoy «se reúne el Parlamento Europeo» y que «está en la agenda el tema Venezuela», que «se está trabajando un acuerdo por consenso de las diferentes fracciones parlamentarias del Parlamento Europeo» y que debe ser aprobada el día jueves, dijo.
Según Barboza, «está previsto que los 28 Estados que componen la UE produzcan una resolución pública en los próximos días».
Por ello, el Parlamento venezolano decidió diferir el debate sobre este y otros temas relacionados a la UE, como una propuesta de la fracción parlamentaria 16 de julio de declarar persona non grata al expresidente del gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero, criticado por opositores en Venezuela.
Barboza destacó además lo «consecuente» que ha sido la UE con la situación de Venezuela.
La alta representante para la Política Exterior de la Unión Europea, Federica Mogherini, dijo hoy desde Francia que no se dan las condiciones para un diálogo o una mediación en Venezuela, si bien señaló que deben intentarse todas las opciones pacíficas para atajar la crisis política, económica y humanitaria en ese país.
En un debate en la Eurocámara, que el jueves aprobará su octava resolución sobre Venezuela en lo que va de legislatura, la jefa de la diplomacia europea señaló que la UE «seguirá explorando la opción de un grupo de contacto que establezca las condiciones que pueden darse para intentar un diálogo», aunque añadió que «es solo explorar» y que no quiere «despertar mucha expectativa» al respecto.
Mogherini subrayó en varias ocasiones que la solución a la grave crisis venezolana deber pasar por ser política, pacífica, democrática y estar «en manos de los propios venezolanos».
En ese sentido, volvió a rechazar en cualquier caso una intervención en Venezuela, aunque dejó claro que la UE no suavizará sus sanciones hasta que no mejore la situación en el país.