El transporte de carga aérea en Latinoamérica experimentó un crecimiento anual del 5,8% en 2017, un porcentaje que supone el primer aumento en la demanda desde hace dos años, según datos de La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA). La organización, que representa al 83 por ciento del tráfico aéreo mundial a través de casi 300 transportistas aéreos, también ha anunciado que el transporte mundial de carga creció un 9% el pasado año, más del doble del 3,6% registrado en 2016.
En este sentido, el Director General y CEO de IATA, Alexandre de Juniac, destacó que “las perspectivas para el transporte aéreo en 2018 son optimistas. La confianza del consumidor es boyante. Y vemos una creciente fortaleza en el comercio electrónico internacional. En general, se prevé que el ritmo de crecimiento disminuya desde el excepcional 9.0% de este año, pero esperamos una expansión de la demanda del 4,5% muy saludable en 2018. Sigue habiendo desafíos, incluida la necesidad de una evolución en toda la industria hacia procesos más eficientes”.
Según señala IATA en un informe, las aerolíneas latinoamericanas experimentaron un crecimiento en la demanda del 4,9% en diciembre y un aumento en la capacidad del 11,6%. Estas cifras contribuyeron a un crecimiento anual de la demanda de fletes del 5,8% y a un aumento de la capacidad del 3,1% en 2017. El repunte de la demanda se suma a los signos de recuperación económica en la economía más grande de la región, Brasil. Los volúmenes de carga internacional ajustados estacionalmente han vuelto a los niveles vistos a finales de 2014.
Nuevas tecnologías y drones
La creciente transformación digital también influye en usuarios de vuelos domésticos y en transportistas aéreos, que ahora pueden rastrear los aviones desde diversas aplicaciones. De hecho, la denominada cuarta revolución industrial trae consigo grandes avances como los drones, también conocidos como vehículos aéreos no tripulados (VANT).
Los drones cuentan con múltiples ventajas, pero existe una legislación respecto a su espacio de vuelo, de ahí que los rastreadores de vuelos sean de gran interés también para esta tecnología, cuyo gasto mundial alcanzará 9.000 millones de dólares en 2018 según datos de IDC, una importante consultora tecnológica que prevé que estos dispositivos registren una tasa de crecimiento anual compuesto del 29,8% en cinco años.
En referencia a ello, el analista de investigación Stacey Soohoo resalta que “los aviones no tripulados se han convertido en una solución de vanguardia para muchas tareas y aplicaciones que alguna vez se consideraron demasiado peligrosas o aburridas.”. Asimismo, el ejecutivo añadió que “las mejoras innovadoras en la tecnología han despertado el interés de las industrias que operan en espacios abiertos o al aire libre, como los servicios públicos”.