Las fallas en la flota de transporte del personal de las empresas básicas de la Corporación Venezolana de Guayana han deteriorado aún más las operaciones de esas industrias, que desde la década de 1950 y 1970 constituyen un polo de desarrollo para proveer materia prima e insumos a los sectores construcción, envases y petróleo.
“80% de la nómina de 50.000 empleados de las empresas de la CVG no puede llegar a los centros de trabajo por la falta de transporte”, alertó Rubén González, directivo del sindicato de Ferrominera del Orinoco. “En el estado Bolívar las distancias entre los hogares del personal y los centros de trabajo son enormes, por lo que el servicio de transporte es indispensable. Debido a la desidia de las autoridades no hay unidades disponibles suficientes para los distintos turnos”, indicó.
Agregó que en el caso de Ferrominera la producción en las minas de hierro de San Isidro, Los Barrancos y Cerro Bolívar está paralizada hace casi un mes porque los operarios no pueden salir de Ciudad Piar, pues “no hay ni un bus en servicio”.
Fuentes sindicales de la Siderúrgica del Orinoco, Bauxilum, Alcasa, Venalum y las briqueteras denunciaron también la ausencia de unidades de transporte, situación que incide en la producción ya menguada por la falta de mantenimiento y repuestos en las plantas.
“En Carbonorca el traslado funcionó bien mientras lo prestó una empresa privada. El gobierno estatizó el servicio y ahora casi nadie puede llegar a su trabajo”, dijo un empleado de la empresa.
Destacó que cientos de autobuses chinos están parados en los estacionamientos, y son desvalijados. La causa inicial de su salida de circulación fue la falta de cauchos o repuestos. Lo del transporte es solo una parte de los problemas operacionales, la corrupción y desinversión han afectado las empresas en los últimos 16 años.
La continua caída de la producción de acero líquido en Sidor tocó fondo el primer trimestre de 2018 con 29.400 toneladas, lo que equivale a 0,68% de su capacidad instalada de 4,3 millones de toneladas al año, precisaron los sindicalistas Carlos Ramírez y José Luis Alcocer
El volumen registrado entre enero y marzo equivale a 8,2% (358.333,33 toneladas) de lo que la acería manufacturaba en condiciones normales en un mes. “La gestión administrativa de la Siderúrgica al mando de los militares es la más nefasta, exhibe la menor producción registrada en toda la historia de Sidor”, sostuvo Alcocer.
Una fuente sindical, que pidió no mencionar su nombre, indicó que Sidor no elabora cabillas ni hojalata. Esta última es un insumo básico para los envases en la industria de enlatados. Ahora deben importarlo, lo que encarece el precio de los alimentos y otros productos. “Con la falta de acero tampoco hay materia prima para fabricar ataúdes, situación que pone en crisis el servicio en las funerarias”.
Las cifras disponibles de las otras empresas de la CVG corresponden al año pasado. En el sector aluminio Venalum presenta la condición menos grave con una producción de 171.000 toneladas del metal (30% de su capacidad de 630.000 toneladas al año), Bauxilum está paralizada (no produce bauxita ni alúmina), mientras que Alcasa elaboró 15.000 toneladas, que equivale a 7,5% de su capacidad instalada de 200.000 toneladas anuales.
Al cierre de 2017, Ferrominera extrajo 7 millones de toneladas de mineral de hierro: 35% de su capacidad de 20 millones de toneladas por año. Las briqueteras (plantas de pellas y briquetas de hierro estatizadas por Hugo Chávez) produjeron 1 millón de toneladas, 16,6% de su capacidad de 6 millones de toneladas.
El Dato:
El dirigente Rubén González denunció la política del gobierno contra el sindicalismo autónomo mediante el fraude electoral y la suspensión de elecciones –como el caso Sidor– de las organizaciones obreras. Explicó que en Ferrominera intentaron imponer un sindicato paralelo mientras que en Venalum y Alcasa la directiva sindical quedó en manos del oficialismo.