Un total de 42 miembros de ETA permanecían huidos de la justicia española a finales de 2021, según recoge la Memoria Anual de la Fiscalía General del Estado que se presentó este miércoles. En concreto, la Fiscalía los refería como «en paradero desconocido o en países en los que no es posible su extradición». Y es que muchos de los etarras, aunque están huidos, sí que están localizados, concretamente en Venezuela , se ubican más de la mitad según la asociación de víctimas del terrorismo Dignidad y Justicia, bajo el cobijo del gobierno de Nicolás Maduro.
De hecho, los listados de las personas más buscadas, tanto en la página web de la Policía Nacional como de la Guardia Civil, los miembros de ETA continúan en cabeza. Personajes como José Ignacio de Juana Chaos o José Luis Eciolaza «Dienteputo», terroristas con multitud de asesinatos en sus espaldas, además de encontrarse en estos listados, están localizados en Venezuela, donde disfrutan de la protección del gobierno de Nicolás Maduro en la actualidad y antes de Hugo Chávez.
https://twitter.com/AsociacinDigni2/status/1537044162234687488?s=20&t=Y78J0d10J72iEOL4z2diig
Etarras protegidos de Maduro
La asociación de víctimas del terrorismo Dignidad y Justicia contabiliza hasta 26 terroristas huidos en Venezuela en la campaña #StopHuidosETA para localizar y detener a terroristas de la banda huidos de la Justicia que viene desarrollando desde hace dos años.
El régimen de Maduro protege a estos etarras, por ejemplo, concediéndoles la nacionalidad como ocurrió con Juan Manuel Bereciartua, Alberto Cubillas o Xabier Arruti. Estos dos últimos, además, trabajan como funcionarios del gobierno de Maduro.
Otros terroristas están localizados en países como México o Cabo Verde. La asociación de familiares y amigos de los presos Etxerat considera que son 24 los etarras huidos y 8 los que todavía permanecen deportados en estos países, por lo que reduce las cifras de la Fiscalía General del Estado.
Causas pendientes
Además, la Fiscalía añade que de los 42 huidos, 24 tienen requisitorias judiciales. Es decir, 18 de ellos no están buscados por la Justicia, aunque hayan huido, o sus delitos habrían prescrito. De ahí que en los últimos años se esté dando un goteo de terroristas cuyos abogados comprueban si sus delitos han prescrito y, en tal caso, regresan a España. En esas estaba el navarro Lázaro Galarza, acusado de colaborar con el comando Nafarroa en los años 80. Regresó a Pamplona el pasado mes de abril para comprobar su situación jurídica. Pero al volver a México para resolver el papeleo, falleció en accidente laboral el pasado mes de julio. Por lo tanto, en estos momentos habría un total de 41 etarras huidos de la Justicia.
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