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¡Colombia, cinco siglos y seis lustros!  

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Solo unidos podremos vencer las arremetidas de un mal rebautizado “socialismo del siglo XXI”. Tales sombras deben ser enfrentadas y derrotadas, como a un silencioso cáncer que penetra el cuerpo social de la extensa región de América del Norte, del Centro, del Sur y del Caribe.

Nuestro territorio continental ha sido privilegiado por la providencia. Poseemos riquezas naturales excepcionales. Suramérica posee grandes reservas probadas de gas natural, de las cuales Venezuela tiene alrededor de 70%; Brasil 6%; Trinidad y Tobago 5%; Argentina, Bolivia, Perú y México cada una alrededor de 4%. La región en territorio venezolano tiene posesión de las mayores reservas probadas de petróleo del mundo, alcanzando a producir, hace más de 20 años unos 3,3 millones de barriles de crudo por día. Venezuela tiene la mayor reserva de gas natural de Suramérica y la octava del mundo. La importancia estratégica de nuestro potencial energético para desarrollar toda la región latinoamericana, con el gas natural y el petróleo, sin embargo, no es tan vital para un futuro más allá de lo inmediato como nuestra reserva de agua dulce, la otra gran fortaleza de nuestra América.

Habitamos un planeta Tierra con finitas posibilidades de agua dulce; aunque cubierto, como sabemos, mayoritariamente por agua, sólo 2,5% de este contenido es dulce, en un volumen total que se estima  en 38 millones de kilómetros cúbicos. Del mismo se concentran las tres cuartas partes (75%) en glaciares de los casquetes polares. 21% está almacenado en el subsuelo y 4% restante en lagos y ríos. Pero lo que hace más sensible y delicado este vital asunto es que sólo la mitad del agua dulce disponible es potable, por lo que requerirá de procesos energéticos para su transportación y potabilización futura.

Aun considerando un futuro estable de nuestra tasa de crecimiento poblacional del planeta, nos debe quedar claro que el agua es el recurso estratégico más escaso e importante a defender desde una fuerte posición de unión americana. Colombia, en su calidad de miembro de la OTAN, es aliado consolidado de la defensa occidental de nuestra región latinoamericana.

Desde el sencillo marco conceptual descrito anteriormente, y con base a éstas reservas naturales vitales de energía y agua dulce en América, con Venezuela con las más grandes reservas energéticas del mundo y conteniendo en suma 47% del total de las reservas de agua dulce del mundo que Argentina comparte con Brasil, Paraguay y Uruguay, en una de las tres reservas más grandes de agua subterránea del mundo, con el Acuífero Guaraní se estima se podría abastecer de agua dulce y pura a unas 360 millones de personas.

Las riquezas naturales de América, ejemplificadas en las dos variables claves señaladas anteriormente, por tanto nos permitirían enfrentar con éxito un futuro desafiante para vencer vitales carencias materiales que se han venido enquistado por ausencia de un Estado eficaz que libere las fuerzas productivas mediante una correcta concepción de Estado  moderno. Un Estado no confiscador de la riqueza construida por el hombre emprendedor, sino promotor de la misma, sin excesiva carga tributaria para su deformación del papel del Estado en la sociedad, que es para protegerlo y no para secuestrarla.

Un solo ser social americano se viene configurando mediante el desplazamiento multitudinario de familias que huyen de la miseria y la barbarie que se ocasiona el Centro y Sur de América Latina y el Caribe, desde dicha concepción del Estado controlador y de promoción de la criminalidad de élites corrompidas que asaltan la riqueza que se produce a pesar de ellos mismos. Nos estamos resintiendo cada vez más por el secuestro de nuestra familias y naciones desde un “pacto antihistórico de agrupaciones de extrema izquierda y extrema derecha”. En realidad son sectores criminales cuyo objetivo fue, es y será siempre obtener el poder por cualquier medio para retenerlo a cualquier precio, sin promover el desarrollo humano sino su esclavitud.

Llevándose por delante valores y principios fundacionales de las sociedades democráticas nacientes en nuestro subcontinente del Centro y Suramérica y el Caribe, a costa de grandes sacrificios de nuestros mayores de generaciones luchadoras precedentes que durante el siglo pasado dejaron constancia de su claridad para lograr la evolución de un sistema de derecho y de justicia en contra de la barbarie de la violencia y el crimen practicados, desde la justificación de una supuesta oferta de instauración de la igualdad y redención de la pobreza. Esta fue sin duda, y sigue siendo, el caldo de cultivo o enfermedad endémica que la región ha permitido para su atraso y crisis actual.

Los que defienden en esta hora decisiva de la patria continental en primer orden sus colores partidistas e intereses sectoriales, por encima de los intereses del bien supremo de la libertad y la democracia continental ,deberán ser relegados y desconocidos desde las fuerzas del bien, en cualquier lugar del territorio de América donde nos encontremos.

Debemos cohesionarnos para derrotar las fuerzas del mal que ya se desataron una vez desde su origen con epicentro en la Rusia de la revolución bolchevique de hace un siglo, y que se entroniza en la  isla de Cuba por obra del narcocomunista Fidel Castro y sus adláteres. En esta hora decisiva para nuestro continente americano que se debió siempre llamar “Colombia” todos estamos con ella para vencer.

En en este continente que se debió llamar “Colombia”; en esta hora decisiva de lucha, de este gran año 2022 cuando mañana 29 de mayo en nuestra patria americana se juegue su futuro inmediato, no solo en homenaje al gran Cristóbal Colón que cumplirá en agosto los 530 años “cinco siglo y seis lustros” desde aquella hazaña en 1492 de atravesar nuevos mares abrir nuevos destinos para la humanidad, el Capitán de la Fe, del coraje y del conocimiento de su tiempo Cristóbal Colón fue, deber ser y será símbolo de un nuevo mundo. En defensa de nuestras familias que sufren persecución y hambre; familias desplazadas de nuestras patrias de origen en cualquier rincón de América, les convoco a todos y a cada uno de ustedes hermanos “caballeros de Colón” a enfrentar sin vacilaciones y a derrotar el neo narco comunismo internacional que nos amenaza con su depravación encubierta en astuto disfraz de blanca ovejita democrática que cree en elecciones. Les convoco desde nuestra Cátedra Internacional por la Libertad Francisco de Miranda a salvar a Colombia, que es salvar a la América toda de la trampa de la tiranía.

[email protected]

@gonzalezdelcas

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