El tenista español Carlos Alcaraz se apuntó su primera victoria ante su ídolo Rafa Nadal (6-2, 1-6, 6-3) este viernes para acceder a semifinales en el Mutua Madrid Open, cuarto Masters 1.000 de la temporada. Allí se medirá este sábado en la Caja Mágica por primera vez con el serbio Novak Djokovic, número uno del mundo.
El murciano tuvo que tumbar un par de veces al rey de la tierra, tras un 6-2 en el primer set y un segundo parcial complicado en el que se dobló el tobillo derecho. Luego hubo otro parón por una incidencia médica en la pista Manolo Santana. El partido se volvió loco, pero en el tercer set volvió la lógica de Alcaraz.
Alcaraz, de 19 años de edad recién cumplidos, era el favorito para un Nadal que aceptó en la previa que el sorpasso era cuestión de tiempo. La costilla rota hace seis semanas cortó en seco el regreso triunfal en 2022 del balear, y en Madrid, con dos victorias y un puñado de entrenamientos, no dio para recuperarla.
El de El Palmar, que pone un 26-3 en lo que va de año, llegaba crecido en un Top 10 que seguirá rebajando el lunes y un juego dominante con poco rival ahora mismo. Tras la puesta en escena más bulliciosa de la semana, la Manolo Santana no se abrochó el cinturón cuando Nadal y Alcaraz se repartían ya duros golpes.
Un break tras otro hasta que el murciano logró el segundo y el partido se calmó. La bola de Alcaraz corría más, y detrás de ella, el balear. A falta de una derecha dominadora, el de El Palmar sacó su revés cruzado y el repertorio de dejadas para mantener a Nadal fuera de combate. El campeón de 21 grandes se vio como temía a merced del juego más afinado del reciente campeón en Barcelona.
Lucha en la cancha
Al ataque, el murciano firmó un nuevo break para el 5-2 y después lució un saque también certero para sellar la primera manga con estilo. Aún tenía que rematar la faena Alcaraz, en el tercer partido contra su ídolo. En el primero le destrozó el balear, hace un año en Madrid; en el segundo le costó a Nadal tres sets y una costilla rota en Indian Wells, y el tercero dejó ya este simbólico relevo generacional aunque con suspense.
El murciano remontó un 0-40 en su primer saque del segundo set y fue con todo hasta jugarse el tobillo derecho en el 1-2. El pupilo de Juan Carlos Ferrero recibió tratamiento en la pista y un fuerte vendaje, pero perdió la comodidad y Nadal no lo desaprovechó. El cinco veces campeón en Madrid ganó 20 de los últimos 21 puntos de la segunda manga para poner el 1-6.
El tercer set traía un partido nuevo, tras otro parón largo de tratamiento para el murciano, y una incógnita que no tardó en resolver Alcaraz. El tres veces campeón esta temporada recuperó ese revés cruzado y el dominio sobre la pista para tomar ventaja (3-1). Nadal se vio de nuevo a remolque y, como toda la semana, aceptó que no está con el arsenal preparado para mucho alarde.
A pesar de cierta montaña rusa, de las emociones y el cartel, Alcaraz manejó los momentos, los nervios y los contratiempos. El joven sacó el talento que deslumbra en la ATP y tumbar por primera vez a Nadal. El balear se despidió de Madrid con resignación pero tiempo para la puesta a punto que tiene como objetivo Roland Garros.
Saque y a la red, una derecha fuera, un revés paralelo, otra que falla, una dejada que no falte y una derecha paralela con Nadal. Así cerró el triunfo el aprendiz, con el maestro esperando en mitad de la pista para aceptar la derrota, aunque aún no el relevo. El murciano se medirá en semifinales con un Djokovic también con pinzas, muy pocos partidos en 2022, que venció (6-3, 6-4) al polaco Hubert Hurkacz.
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