Pedro Sánchez, presidente del gobierno español, encargó a los Ministerios de Interior y Asuntos Exteriores a que agilicen y aumenten el número de visados por razones humanitarias que España concede a solicitantes venezolanos.
Así lo precisó este martes Josep Borrell, ministro de Asuntos Exteriores, en un desayuno informativo luego de que le preguntaran por la situación en Venezuela y la posición del gobierno al respecto.
«No damos a basto con las solicitudes», explicó el ministro, quien destacó la grave crisis humanitaria que supone la huida de aproximadamente dos millones y medio de venezolanos del país.
De acuerdo con estimaciones de Naciones Unidas, 2,3 millones de personas abandonaron Venezuela desde 2014, dirigiéndose principalmente a Colombia, Ecuador, Perú y Brasil. La mayoría de ellos citan la falta de alimentos como la principal razón de su migración.
Borrell también defendió la importancia de que España siga «hablando con el régimen de Venezuela si eso sirve para desbloquear una situación que está bastante bloqueada».
El ministro español señaló que esta disposición al diálogo no supone un cambio de la posición de España, que se mantiene alineada con la de la Unión Europea: «No nos desmarcamos de ella, pero si queremos jugar algún papel no podemos decir que no hablamos con una parte», aseguró.
Así, apuntó que «las exigencias de no diálogo no parecen una contribución positiva a la resolución de un problema que está enquistado» entre una oposición dividida y un gobierno fuertemente anclado en sus poder.
Por esa razón, desestimó las críticas a su disposición a hablar con el canciller venezolano, Jorge Arreaza, y señaló que se debe hablar con quien se tiene desacuerdos para intentar resolver los problemas.
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