Foto: archivo
Parlamentarios de la nueva Asamblea Nacional se convierten en cómplices del Estado violador de derechos humanos al discutir una ley para el respeto de estos en el ejercicio de la función pública, olvidando lo que ya está establecido en el artículo 19 de la Constitución.
Quiero manifestar mi total desacuerdo con esa farsa iniciativa legislativa que demuestra una ignorancia total de lo que ya estipula nuestra carta magna en el artículo arriba mencionado, que obliga al Estado a garantizar y hacer respetar los derechos humanos de los ciudadanos, así como también de la Ley Orgánica del Trabajo y pactos internacionales en materia de derechos humanos, suscritos y ratificados por el Estado venezolano.
Con esta nueva ley lo que pretenden es lavar el rostro de los responsables de las violaciones graves de los derechos humanos y de los crímenes de lesa humanidad que procesa la Corte Penal Internacional.
El informe de la fiscal saliente Fatou Bensouda, hecho público en días pasados, afirma que existen razones suficientes para investigar la violación de derechos humanos en el país. Asimismo, el informe de la Misión Independiente de Determinación de Hechos de la ONU, en el que se califica y responsabiliza a quienes cometieron crímenes de lesa humanidad. Y la actualización del informe presentado por la alta comisionada para los derechos humanos de la ONU, Michelle Bachelet, donde destaca que se utiliza el mismo patrón para la tortura, detenciones arbitrarias, desapariciones forzadas de personas y ejecuciones extrajudiciales.
Exijo a la mesa de diálogo iniciada en México no incluir en la agenda nada que tenga que ver con el expediente que actualmente procesa la CPI contra los responsables de las violaciones graves de derechos humanos y crímenes de lesa humanidad. El dolor, sufrimiento y el luto de víctimas y familiares no se negocia.
Siento pena al ver cómo el nuevo parlamento se desprendió de todas sus atribuciones establecidas en nuestra Constitución: control, legislación, autonomía e independencia. Lo más grave es que se sigue negando a discutir el expediente que cursa en la CPI contra el Estado. No olviden que la historia sigue documentado sus actuaciones .
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