Una encuesta realizada por KPMG para determinar la situación de las empresas venezolanas por la nueva realidad de la pandemia señaló que 53% de los consultados, 87 ejecutivos de compañías líderes, percibe que la situación económica actual es negativa.
Las fallas en los servicios públicos (31%), el entorno macroeconómico (30%) y la inestabilidad política y entorno regulatorio (30%) son los principales obstáculos para el crecimiento de las empresas venezolanas en los próximos meses.
60% de los encuestados por KPMG considera que la situación económica se mantendrá igual en los próximos meses.
Asimismo, 39% de los consultados señala que será a partir de 2023 en adelante que se retornará a la normalidad. 31% cree que será a finales de 2022.
KPMG aplicó una encuesta diseñada para la comunidad empresarial, obteniendo las respuestas de 87 ejecutivos de compañías líderes en el mercado venezolano. “La recolección de datos se hizo entre el 30 de junio y el 3 de agosto de 2021”, aclara.
“Los resultados conducen a crear un diagnóstico de cuáles son los puntos clave en los que deben enfocarse las empresas y las competencias necesarias con las que deben contar los ejecutivos para lograr llevar a cabo modelos de negocio exitosos en el contexto actual”, explica.
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— KPMG en Venezuela (@KPMG_VE) August 17, 2021
Las empresas y la nueva realidad
“Las organizaciones consideran que los principales retos durante la pandemia han sido mantener el desarrollo de productos y la prestación de servicios bajo estrictos estándares de bioseguridad (44%), digitalizar sus procesos (41%), la restructuración de la empresa (40%), la gestión del personal (39%), definir la estrategia de precios (37%) y adaptarse a los cambios del mercado (32%)”, señala KPMG.
Para afrontar esos desafíos, las empresas han realizado una reestructuración operativa (69%), lo que da a entender que muchas empresas han pasado a un esquema de trabajo remoto, han reducido personal y aplican un modelo de negocio basado en que tanto colaboradores como clientes no tengan necesidad de ir a un espacio físico.
Solo 13% de las organizaciones encuestadas dijo que había logrado aumentar el volumen de ventas durante la pandemia.
72% de los encuestados indicó que las empresas han aplicado ajustes en la estructura de costos, 54% en su plantilla laboral y 40% en la producción y capacidad instalada.
Los trabajadores
60% de los consultados señaló que las empresas han realizado bonificaciones por desempeño para retener el talento. 54% ha optado por hacer ajustes salariales continuos.
KPMG indicó, de igual forma, que la calidad de los trabajadores se ha visto afectada durante la pandemia: 54% disminuyó reuniones sociales y espacios creativos, 43% disminuyó la productividad en espacios remotos, 33% aumentó las horas invertidas en el trabajo y 21% aumentó los errores por agotamiento y cansancio.
Las empresas asimismo afirmaron que han aumentado la inversión en bioseguridad (62%), bonificaciones (55%) y los procesos de desarrollo y formación virtual (29%).
Cambios en las empresas
La encuesta también hace referencia a los efectos de la pandemia en la transformación digital e implementación de nuevas tecnologías: 82% de los consultados manifestó que la crisis por coronavirus la aceleró.
De igual forma, 54% de los consultados señalaron que las empresas no han evaluado el impacto social, ambiental o económico durante la pandemia, “lo cual es un punto para reflexionar, pues la transformación sostenible constituye, junto a la digital, uno de los principales retos a los cuales se enfrentan las compañías, y tiene impacto en sus modelos de negocio, de gobierno corporativo y de gestión de las compañías. Sus efectos se reflejan en las juntas directivas, pero también en la estrategia, en los modelos de riesgos, en los procesos de financiamiento y desarrollo o en la cultura de la compañía, entre otros”.
Crecimiento económico
Las empresas consideran que, a pesar de todas las dificultades, se podrá crecer o al menos mantenerse igual tanto en 2021 como en 2022.
Prevén la necesidad de invertir en innovación, agilizar procesos internos, aumentar la productividad e impulsar la capacitación de los empleados.
“En cuanto al financiamiento, las principales fuentes consideradas por las empresas son el capital propio (46%) y el aporte de los accionistas (40%). Solo 23% considera utilizar el crédito bancario como fuente de financiamiento en los próximos 12 meses”, destaca KPMG.
Los principales obstáculos para la transformación digital, la adopción de inteligencia artificial y nuevas tecnologías son las fallas en los servicios públicos (59%), los costos de implementación (55%) y el costo de actualización de licencias (43%).
Finalmente, la encuesta señala que las empresas orientarán sus esfuerzos en los próximos meses en mercadeo, alianzas y proveedores y desarrollo de nuevos productos y servicios.
Conclusiones
KPMG recomienda una gran capacidad de adaptabilidad de las empresas a la nueva realidad.
“A más de un año de haberse declarado la pandemia por covid-19, las perspectivas globales siguen siendo muy inciertas”, señala el informe.
“En Venezuela, aunque el entorno macroeconómico se mantiene sin mayores cambios con respecto al 2020, se visualiza una leve mejora de las perspectivas con respecto a los últimos años gracias al aprendizaje adquirido por las empresas y a los cambios en la dinámica de la economía global”, agrega.
“Como recomendaciones, las empresas venezolanas deben seguir trabajando en la comprensión del mercado y su impacto real en el negocio, mediante la construcción de métricas e indicadores que se adapten a la nueva realidad y la investigación de mercado que permita identificar los cambios en los hábitos del consumidor y los nuevos competidores; actualizar el mapa de riesgos de la empresa; financiar sus operaciones a través de fuentes externas y con capital propio para lograr una optimización de sus recursos; innovar en el desarrollo de capacidades dinámicas que sirvan de impulso para adaptar el portafolio de productos y la estabilidad de su modelo de negocio”, concluye.
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