Ana Suniaga, representante legal del Colegio de Enfermería del estado Anzoátegui, denunció una serie de irregularidades en el caso judicial que se le sigue a la enfermera Ada Macuare, detenida el 21 de julio.
Macure, que se desempeñaba como jefa del Departamento de Enfermería del hospital de Barcelona, fue detenida e imputada por el Ministerio Público por instigación al odio. Fue recluida en la sede de la policía del municipio Diego Bautista Urbaneja, en Barcelona.
La defensora señaló que desde el miércoles de la semana pasada no había podido conversar con sus abogados, hasta este lunes 26 de julio, cuando se llevó a cabo la audiencia de presentación y le ratificaron la medida privativa de libertad.
Violación de los derechos de la enfermera
La jurista, y también enfermera, calificó las acciones de detención y posterior imputación como «violatorias de los derechos de la colega. Esto, en principio por como se llevó a cabo la detención por dos funcionarios que se hicieron pasar como pacientes y que luego de examinarlos y darles las órdenes para comprar los medicamentos se fueron al área administrativa sacando esposadas a las colegas Johana Querales y Ada Macuare de su oficina».
Agregó en declaraciones a Fe y Alegría que también le fueron violados sus derechos «a una llamada, a ver a su familia, y sobre todo de hablar con sus abogados».
El gobernador de Anzoátegui, Antonio Barreto Sira, que también se pronunció sobre el caso, denunció que a la enfermera se le persigue y encarcela solo por un mensaje de teléfono donde presuntamente exhortaba a sus compañeros de trabajo a seguir protestando por insumos y vacunas.
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