Después de enfrentarse en una primera vuelta extraordinariamente fragmentada, los candidatos que pasan a la segunda ronda de las elecciones presidenciales en Perú son Pedro Castillo, de Perú Libre, y Keiko Fujimori, de Fuerza Popular.
Con las actas procesadas al 100%, la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) anunció que Pedro Castillo logró 19,10% de los votos, seguido de Keiko Fujimori, de Fuerza Popular, con 13,37% de los sufragios.
Ambos se enfrentarán en las urnas el domingo 6 de junio.
Quien resulte ganador asumirá la presidencia el 28 de julio en medio de una de las peores crisis de la historia reciente peruana, a causa de la pandemia de coronavirus.
¿Quiénes son los candidatos y qué proponen?
Castillo, la «sorpresa»
Castillo, profesor de primaria de 51 años, se postula por Perú Libre, que se define como un partido de izquierda marxista y que tiene como logo un lápiz.
- Keiko Fujimori: “Chávez y Maduro son un cáncer que hizo metástasis y está matando a los venezolanos”
El día de las elecciones acaparó todas las miradas al llegar a votar a caballo a su local de sufragio ubicado en Tacabamba, en la provincia de Chota, en Cajamarca, a 900 kilómetros de Lima.
La candidatura de Castillo se ubicó entre las favoritas tan solo en las semanas previas a las elecciones.
Castillo «ha reunido el descontento de muchos peruanos pobres, sobre todo del interior del país, históricamente olvidados del centralismo de la capital», según analistas citados por Reuters.
Nacido en Cajamarca y exrondero (miembro de las rondas campesinas, organizaciones comunales de autodefensa), Castillo es profesor de primaria desde 1995. Tiene también un máster en Psicología Educativa.
En 2017 adquirió notoriedad al dirigir una huelga de profesores en varias regiones del país que se extendió por 75 días, para exigir, entre otras cosas, un aumento de sueldos para los maestros peruanos.
Durante la protesta, el entonces ministro del Interior, Carlos Basombrío, vinculó a Castillo con el Movimiento por la Amnistía y los Derechos Fundamentales (Movadef).
Este grupo pide la libertad de los presos por el conflicto interno peruano (1980-2000), incluido Abimael Guzmán, fundador de Sendero Luminoso (SL), el grupo armado maoísta que buscaba tomar el poder por la vía armada y desató una guerra que dejó miles de muertos y desaparecidos.
Castillo negó cualquier relación con el Movadef.
Ahora, como candidato a la presidencia, propone redactar una nueva Constitución mediante una Asamblea Constituyente, aumentar el presupuesto para la agricultura y defender y conservar el medio ambiente, en oposición al «neoliberalismo».
En su plan de gobierno propone cambiar la «economía social de mercado» que establece la Constitución actual por una «economía popular con mercados», cambiar al Estado «supervisor» por un Estado «interventor, planificador, innovador, empresario y protector», y renegociar el reparto de utilidades de las empresas extractivas trasnacionales.
Además, propone aumentar el presupuesto para la educación del 3,5% al 10% del PIB.
En cuestiones sociales, se manifestó en contra de legalizar el aborto y el matrimonio igualitario.
Fujimori, la candidata con mayor antivoto
Keiko Fujimori, de 45 años y líder del partido Fuerza Popular, es una de las políticas más conocidas y polémicas de Perú.
Es hija del expresidente Alberto Fujimori, quien gobernó de 1990 a 2000 y actualmente cumple una condena de 25 años de prisión por violaciones a los derechos humanos.
Esta es la tercera vez que la política intenta llegar a la presidencia.
Fue finalista en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de 2011 y 2016, en las que perdió frente a Ollanta Humala y Pedro Pablo Kuczynski (PPK), respectivamente. Pero en 2016, su partido obtuvo la mayoría absoluta en el Congreso.
De ganar esta segunda vuelta, sería la primera presidenta mujer de Perú.
La candidata estudió Administración de Empresas en la Universidad de Boston (EE UU) y obtuvo una maestría en el mismo campo en la Universidad de Columbia (EE UU).
Está casada con el estadounidense Mark Vito Villanella y fue congresista entre 2006 y 2011.
Keiko Fujimori cumplió dos veces parte de una orden de prisión preventiva entre octubre de 2018 y mayo de 2020 a causa de una investigación en curso por supuesto lavado de activos provenientes de sobornos de la constructora brasileña Odebrecht, para presuntamente financiar su campaña de 2011 y 2016. Ella rechaza las acusaciones.
Durante su campaña, habló de aplicar una «demodura», una combinación de democracia y mano dura en el país.
Además, defiende la Constitución de 1993 (promulgada durante el gobierno de su padre) y en su plan de gobierno, «Rescate 2021», propone el «desarrollo de una verdadera economía social de mercado» que promueva «el trabajo formal, el desarrollo de emprendimientos, las asociaciones público-privadas y la inversión sostenible y socialmente responsable».
El plan de gobierno también promete fomentar «una sana convivencia entre la agricultura y minería».
Fujimori se ha manifestado en contra de la eutanasia y la interrupción del embarazo —aunque no en caso de aborto terapéutico — y a favor de «legislar la unión civil desde la perspectiva patrimonial», según escribió en una columna en la cadena RPP a inicios de marzo.
Hasta fines de marzo, Fujimori tenía 55% de antivoto (quienes decían que definitivamente no votarían por ella), el mayor nivel de rechazo de todos los postulantes, según una encuesta del Instituto de Estudios Peruanos (IEP).
Sin embargo, las preferencias estaban tan fragmentadas que este «antivoto» no le impidió llegar a segunda vuelta.
Ahora, con el pase a segunda vuelta de Castillo, se prevé que Fujimori intente unir a los votantes de los otros candidatos de derecha, sobre todo de Hernando de Soto, de Avanza País, y de Rafael López Aliaga, de Renovación Popular, que quedaron en tercer y cuarto lugar.
Antes del anuncio del resultado oficial de la primera vuelta, Fujimori ya había dicho sobre De Soto que ambos tienen «grandes coincidencias» y que esperaba que pudieran «trabajar juntos».
«Hago una invocación a ellos [De Soto y López Aliaga] que han señalado que creen en un modelo de inversión privada, que han señalado que no quieren que Perú se convierta en Cuba o Venezuela», dijo también la candidata la noche de las elecciones.
El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!
Apoya a El Nacional