Apóyanos

El juicio de los 7 de Chicago: la historia real de la película de Netflix nominada al Oscar

    • X
    • Facebook
    • Whatsapp
    • Telegram
    • Linkedin
    • Email
  • X
  • Facebook
  • Whatsapp
  • Telegram
  • Linkedin
  • Email

El juicio de los 7 de Chicago, el filme que Netflix estrenó en octubre de 2020, está basado en hechos reales. La historia está inspirada en un conflicto legal surgido de las protestas realizadas por un grupo de jóvenes activistas contra la guerra de Vietnam en 1968. Con guion y dirección de Aaron Sorkin, la película fue nominada a los Oscar de 2021 en cinco categorías: Mejor película, Mejor actor de reparto (por Sacha Baron Cohen), Mejor guion original, Mejor fotografía y Mejor montaje.

La historia detrás

En octubre de 1968, la convención del Partido Demócrata se dispuso a elegir su candidato presidencial. Lindon B. Johnson, por entonces presidente, resignó su reelección por la mala prensa que había venido con la participación de Estados Unidos en la Guerra de Vietnam. Bobby Kennedy, que tenía grandes chances de seguir sus pasos, fue asesinado, lo que allanó el terreno para que el vicepresidente Hubert Humphrey sea elegido como candidato del partido. Por esos días de debates y discursos, las calles de Chicago no aguardaron la decisión con tranquilidad. Con una combinación de presión social, malestar por la Guerra de Vietnam y con una ciudad militarizada, cada esquina se convirtió en el escenario de una batalla campal.

El juicio de los 7 de Chicago

A pesar del ánimo pacífico de algunas organizaciones, la ciudad quería prohibir las manifestaciones a como diera lugar. Todo tipo de intervenciones se suspendían sin importar que fueran o no violentas; cualquier pedido para realizar un acto público era denegado. Las protestas, en total, duraron cuatro días, y la administración demócrata se negó a juzgar a los partícipes de los disturbios.

Sin embargo, con el nuevo gobierno -que puso a los republicanos al poder-, todo cambió: las autoridades querían castigar a los partícipes de aquellas manifestaciones y decidieron juzgar a ocho personas que estuvieron en las calles por esos días. Todos ellos eran referentes sociales que se oponían a la guerra, más un activista de Black Panthers (Panteras negras), una organización activista por los derechos raciales.

El juicio fue un verdadero hito en la historia estadounidense y terminó por dar gran difusión a las ideas de los acusados, que en realidad fueron ocho, y no siete: Abbie Hoffman, Jerry Rubin, David Dellinger, Tom Hayden, Rennie Davis, John Froines, Bobby Seale y Lee Weiner. El abogado del grupo, Jerry Rubin, también se convirtió en una verdadera celebridad por aquellos días. Dado que el grupo entendió el peso político que tenía esa sentencia, todos acordaron que, más que convencer al jurado de su inocencia, su principal tarea sería conseguir el mayor alcance para su mensaje. Aunque todos se convirtieron en celebridades por aquellos días, Hoffman, en particular, alcanzó una fama desmedida: llegó a la tapa de Rolling Stone, interrumpió shows en Woodstock y escribió un libro.

En total, el juicio duró cinco meses de juicio. El 18 de febrero de 1970, los siete imputados fueron absueltos del cargo de conspiración, aunque cinco de ellos -todos menos Froines y Weiner- fueron condenados a cinco años de prisión por cruzar las fronteras estatales para incitar a ser parte de las manifestaciones. Además, fueron obligados a pagar una multa de 5000 dólares cada uno.

Cerrada esa causa, Seale tuvo que enfrentar otro juicio por homicidio, Rennie se fanatizó con una suerte de gurú que pilotaba aviones, Rubin fue un corredor de bolsa y Hoffman, que era bipolar, se realizó intervenciones quirúrgicas en el rostro para cambiarse la identidad y terminó suicidándose años más tarde. Aunque las vidas de todos tomaron rumbos muy dispares, todas cambiaron para siempre a partir del histórico juicio.

El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!

Apoya a El Nacional