La Unión Europea expresó este sábado su preocupación por las últimas ejecuciones federales en Estados Unidos, particularmente la del reo Orlando Hall, el pasado 19 de noviembre en el estado de Indiana, la primera de la historia durante una transición presidencial.
Hall fue ejecutado por secuestrar, violar y enterrar viva a una adolescente de 16 años de edad en Texas en 1994, informó el Departamento de Justicia de Estados Unidos. La ejecución se produjo después de que el Tribunal Supremo de Estados Unidos denegara una petición para detenerla.
El preso, de 49 años de edad, fue el octavo presidiario ejecutado por el gobierno estadounidense este año después de una interrupción de 17 años en este tipo de condenas.
En este sentido, el portavoz de Exteriores de la UE, Peter Stano, recordó que está previsto que otros seis presos más sean ejecutados en diciembre y enero en Estados Unidos.
«La Unión Europea recuerda su oposición firme e inequívoca a la pena de muerte en todo momento y en todas las circunstancias e insta a la Administración estadounidense a que revoque su decisión y detenga todas las ejecuciones federales», de acuerdo con la nota.
El bloque europeo reiteró su consideración de que «la pena de muerte es un castigo cruel e inhumano, que no actúa como disuasivo del delito», además de que «representa una negación inaceptable de la dignidad e integridad humanas, mientras que cualquier error judicial es irreversible».
Asimismo, la UE lamentó que «el elevado número de ejecuciones en los Estados Unidos a nivel federal está en contradicción con la fuerte disminución del uso de la pena de muerte en los distintos estados de Estados Unidos y las tendencias mundiales».
«La Unión Europea está comprometida con el avance de los valores universales para todos y continuará su liderazgo mundial en el campo de los Derechos Humanos y la democracia, tal como se define en el nuevo Plan de acción de la UE en estos ámbitos para 2020-2024», concluyó la nota.
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